Entre la realidad y la quimera


        Ampliación del Puerto, paralización del Hospital

            La quimera es aquello que se imagina como posible o verdadero pero no lo es. La quimera era también un animal fantástico de la mitología griega. Perseguir quimeras es posible, pero no conduce a ningún lado. Pienso en esto con la visita de la Ministra de Fomento Ana Pastor. Observen que ella no ha dicho nada de si es posible o no la ampliación. Ella no ha dicho absolutamente nada que la comprometa. Ellos empeñaron su palabra en que eso sería una realidad con el nuevo gobierno de Rajoy, era en la práctica el primer mandamiento de la nueva era de nuestro Presidente: «Creerás en la ampliación del puerto sobre todas la cosas».

       Le pregunté a alguien que sabe del Puerto de Melilla y de su ampliación si era posible semejante cosa y me dijo: » Si alguien deposita en una caja 300 millones de euros ( cincuenta mil millones de pesetas), es posible». Hablábamos solo de la viabilidad económica. Las cuestiones técnicas mejor dejarlas aparte. 300 millones de euros es un 20% más que todo el presupuesto de Melilla de un año.

        ¿Cual es la realidad?. La realidad es aquello de lo que nadie habla, como por ejemplo del nuevo Hospital Universitario, que lleva parado desde el pasado 2 de abril (40 días), y eso que era sólamente una obra de 41 millones de euros previamente librados, así como la modificación del proyecto de 8 millones más. El nuevo hospital supone solo una sexta parte de la cantidad necesaria para ampliar el Puerto de Melilla. ¿Tiene parada una obra con presupuesto y quieren iniciar otra seis veces mayor sin tener un solo euro?. ¿Porqué nadie le preguntó a la Ministra de Fomento por el nuevo hospital?.

        Lo que sí es seguro es que la idea de la ampliación del Puerto ya ha generado cuantiosos gastos en publicidad, gastos y comilonas y además nos enteramos, tras ganar las elecciones el PP, de que el proyecto de ampliación no estaba ni siquiera hecho. Es o era una simple idea que ya ha consumido millones de euros, mientras que en nuestra flamante Estación Marítima, con el gimnasio más grande de África, solo puede atracar un barco de pasajeros. ¿Sabe alguien qué va a pasar en verano con la quiebra de las navieras marroquíes?. Ya propondremos este tema.