Tras el rastro de la aves


          Desde hace tiempo seguimos el rastro de las aves que sobrevuelan y anidan en  Melilla. Hemos escrito de garcetas, garcillas, cormoranes, estorninos, gorriones y gaviotas. Constituyen nuestra poca fauna y casi nuestro único contacto con la naturaleza. Hace tiempo que la desembocadura del Río de Oro, completamente infectada, ya no es un lugar para las aves.  Hace no mucho tiempo, pudimos hacer imágenes de la vida en la desembocadura del río melillense. Bien cuidado, y con una gestión digna de tal nombre, podría ser un pequeño y atractivo espacio natural. Lugar de reposo y de alimento para las aves. No llegaría a ser marisma o un estuario pero sí una pequeña laguna habitable.

           La sequía de los últimos años tampoco ha ayudado a estas especies de aves migratorias. La desecación de la lagunilla de Mariguari, les ha privado de un espacio natural de reposo. Hay un pequeño estanque en el interior del perímetro melillense que les sirve de lugar de refugio. Es muy común verlas posadas en cualquier lugar de la ciudad en donde exista un pequeño estanque cercano.  También en el Rastro, aunque las que por allí deambulan tienen un aspecto sucio y desaliñado, casi enfermizo, como reflejan algunas de las fotos que no envía una colaboradora. Son garcillas que acuden allí a diario en busca de pescado, casi siempre en mal estado de conservación. Su aspecto lo dice todo. Normalmente las garcillas son aves de bonito porte y presencia, como el de la garceta que recorre la orilla de la antigua dársena pesquera.

              El Alminar también es visual, por eso despediremos el mes de junio con imágenes de aves, algunas bellas y otras no tanto; pero es que la realidad es así. El resto es propaganda y no creemos en ella.

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Camino del Gobierno en Melilla


       El camino parece despejado para que la derecha popular de Melilla, con solo 13.000 votos, pueda volver a gobernar en la ciudad, aunque en minoría, por primera vez desde el año 2003. Los partidos de la oposición pese a sumar 17.000 votos y 13 diputados, no han conseguido llegar a un acuerdo para formar un gobierno alternativo, que es lo que quería la mayoría de los melillenses, tal y como expresaron en las urnas el pasado 24 de mayo.

                  El gobierno alternativo al partido Popular de Juan José Imbroda tenía dos obstáculos, el primero que ninguno de los grupos minoritarios, Partido Socialista y Ciudadanos, querían asumir una presidencia que les ofrecía Coalición por Melilla, y que entendían que los melillenses nos les habían refrendado de modo suficiente con sus votos.

El otro obstáculo insalvable era que ninguno de  los tres partidos minoritarios (PSOE, Cs y PPL), estaba o está dispuesto a asumir un gobierno presidido por Coalición por Melilla, pese a tener 7 escaños y ser la segunda fuerza política de la ciudad.

              La desunión de las fuerzas políticas de la oposición, nunca existió un frente anti popular, y también la falta del coraje  político suficiente para asumir la constitución de un acuerdo a cuatro bandas, como ya se hiciera para derrocar a Ignacio Velázquez  en 1998, provocarán que Melilla siga en la misma senda y tónica política que hasta ahora. El poder absoluto del que había disfrutado  hasta ahora la derecha melillense se verá mermado y recortado, y tendrá que consensuar cualquier medida, proyecto y sobre todo, los presupuestos.

                      En los últimos días se hablaba de hacer «borrón y cuenta  nueva», pero la impresión existente es que no va a haber ninguna de las dos cosas. El refrán o dicho que viene más al caso es el de: «los unos por los otros y la casa sin barrer». Parece que todo va a quedar en este último. El obstáculo temporal del recurso por presunto fraude del voto por correo ha desaparecido, igual que en 2011; y el posible acuerdo de los grupos de oposición parece diluirse también, como la humedad de la tierra en junio.

         El entorno de la plaza Menéndez y Pelayo es un espacio de análisis político y social de primer orden. Allí se reúnen a diario personas conocidas de la ciudad, políticos ya retirados,  e integrantes del consejo asesor oficioso del entorno presidencial. Han sido días de mucha actividad e incertidumbre política.

                     PD: Coalición por Melilla lo había ofrecido todo, desde la Presidencia, hasta una posible renuncia de Mustafa Aberchán para dar paso a su número dos y facilitar un gobierno alternativo de coalición. Nadie se ha atrevido a aceptar ninguna de las dos cosas. Junio parece haber agostado cualquier esperanza de cambio.

Herejes, profetas y brujas


              San Ireneo de Lyon, un santo contra los herejes

          Hoy es el día de San Ireneo de Lyon, un santo y teólogo del siglo II, fallecido en esta ciudad de Francia, que compuso un monumental tratado contra la herejías del cristianismo, que por entonces eran legión. Su obra más conocida es Adversus Haereses, en las que detalla, combate e intenta refutar las más conocidas o activas del momento.

                Gracias a la obra de San Ireneo conocemos los nombres de muchas de ellas (Barbeliotas, Ofitas, Caínitas), siendo Valentín y sus valentinianos, y Marción, junto con otros muchos, los principales objetivos de sus invectivas. La erudición de San Irineo era inmensa. Tenía una gran ventaja con respecto a nuestros días, y es que estaban muy cerca de los sucesos acaecidos en Palestina en el inicio del siglo I, y contaba con el acceso a textos y relatos pseudo evangélicos que hoy ya están desaparecidas, porque ellos mismos los mandaron quemar. Pese a todo, para poder refutar las doctrinas herejes, debían citarlas de manera prolija, por lo que tuvo que transcribir el contenido principal de las mismas y sus principales afirmaciones, así como sus nombres, con lo que contribuyó a salvar parte de su contenido. Gracias a San Irineo se sabía de la existencia histórica del evangelio de Judas, por lo que la aparición del texto manuscrito hace unos poco años, ya contaba con una prueba de autenticidad esperando  desde el siglo II.

                                        La vida en la disidencia

                Herejes, profetas y brujas, no fueron otra cosa que personas que no aceptaron las verdades doctrinales imperantes en su momento. Unos se opusieron a ellas de modo frontal, los herejes, y les fue bastante mal. Otros grupos, como las brujas, eran mujeres que accedieron a conocimientos medicinales y curativos, y hacían uso de ellos entre la población, por lo que fueron objetos de la ira de los poderes establecidos, que eran los custodios de los saberes tradicionalmente aceptados, y reservados a las clases privilegiadas.  Los profetas eran por lo general, personas, que denunciaban la inmoralidad del poder reinante y pronosticaban su caída, con lo cual también eran objeto de persecución. Profetas y brujas intentaban hacerse un hueco dentro del sistema imperante, los herejes sí se enfrentaban a el.

           En el mundo moderno, surgido a partir del siglo XX, todos los que no aceptaron los sistemas dominantes eran calificados como «disidentes», en los países socialistas, y «antisistemas» en el mundo capitalista. A cualquiera de los grupos de personas encuadrados en categorías les suele ir mal, porque nada altera más a la sociedad, que una persona o grupo que disiente del pensamiento establecido, lo manifiesta y lo hace público, tenga o no seguidores. Quien se sale de la norma es objeto del acoso social, del escarnio o incluso de la ira. Obviamente ni todas las herejías fueron buenas, ni todas las disidencias aceptables, ni todos los profetas tenían tino. Eso sí, el desacierto de algunas de estas disidencias, no hace mejor ni justificable al sistema con el que se enfrentaron. Es una cuestión muy compleja. En general, las herejías, las disidencias, los profetas y las brujas, contribuyeron a mejorar el sistema y a hacerlo más humano.

                                 El triángulo místico de Lyon

                 Lyon, atravesada pro el Ródano, es la tercera ciudad más importante de Francia. Fue uno de los bastiones de La Resistencia durante la II Guerra Mundial, y también compone uno de los vértices del triángulo de peregrinaciones católicas de Francia. En las otras dos puntas se encuentra Lissieu y Ars sur Formans. Francia es muy revolucionaria, muy laica y también muy espiritual. Gracias a las fotografías de Betty Beges, colaboradora del Alminar, podemos compartir las espléndidas vidrieras de la iglesia de San Buenaventura, la catedral de San Juan Bautista, y otras imágenes de Lyon, en el día de San Ireneo.

Juan Medina, memorias de un prisionero de Franco


 Las memorias de Juan Medina en las prisiones de Franco

          Juan Medina Sánchez, un joven melillense, pasó 13 años de su vida como prisionero político o de guerra, entre 1936 y 1949. Las memorias presentadas el pasado viernes en Melilla por sus hijos son el relato de todas las vicisitudes carcelarias, desde el el campo de prisioneros de Zeluán (Marruecos), hasta la prisión de San Miguel en Valencia, en donde fue puesto en libertad. Son las primeras memorias completas presentadas en la ciudad.

       Antes que esto, en 2004, Mª Ángeles Sánchez había publicado y presentado los primeros testimonios de mujeres y hombres prisioneras en el interior del campo de prisioneros de Zeluán, localidad perteneciente al Protectorado español de Marruecos. Eran cartas de los hermanos Montoya Odri, describiendo su situación en el campo y comunicándose entre ellos/as, en el libro Mujeres en Melilla.

         Cinco años antes, en 1999, Enrique Delgado (el que escribe desde El Alminar), había publicado en El Telegrama de Melilla, y a lo largo de tres meses, todos los acontecimientos relacionados en el Alzamiento Militar de Melilla, la primera lista de ejecutados, con 294 nombres, la primera y única aproximación biográfica al General Romerales, el rescate de la memoria de Carlota O ‘Neill, la biografía del comandante Edmundo Seco, del capitán Casado Escudero, la historia de los comandantes Ferrer y Rotger, y también la del Padre Jaén, con la publicación íntegra de sus cartas en 2011, desde la prisión de Rostrogordo.

              Antes de 1999 solo existió el vacío, y después de 2004, solo la aparición del libro de Vicente Moga sobre la Represión de La Masonería en Melilla, rompió el espeso silencio sobre la represión franquista en nuestra ciudad, tanto durante el periodo de Guerra Civil, como en el posterior a la victoria del autodenominado Bando Nacional en 1939.

         En medio de casi dos largas décadas, la presencia constante y dinamizadora de Carlota Leret, en reivindicación de la memoria de sus padres (Virgilio y Carlota), ha supuesto una corriente revitalizadora y renovadora de la memoria republicana de Melilla, en medio del erial impuesto por la derecha desde 1991. Todos estos han sido los apoyos a la memoria histórica de la ciudad.    Todo los demás, han sido traiciones a la memoria, cuyo olvido por parte de las instituciones públicas ha sido y es,  activo y consciente.

                                 El libro de los hijos de Juan Medina

             Las memorias del activista comunista Juan Medina Sánchez, ha sido un trabajo elaborado primero por el propio Juan Medina en sus años de prisión, y luego mecanografiado para su publicación por su mujer e hijos. Juan Medina murió en Barcelona en 1991, por lo que la publicación de sus memorias ha debido esperar casi 25 años. No han contado con el apoyo de ninguna institución pública de la ciudad, que normalmente edita y reedita cualquier cosa. Presentaron las memorias en la Universidad a Distancia de Melilla (que no puede negarse a elloya que es una institución al servicio de todos), apoyados por el historiador Vicente Moga, por la Asociación Ateneo, representada por la maestra Inmaculado Ortell, y por José Juan Medina como portavoz de la familia. El libro es un edición costeada entre 31 personas de Melilla y del entorno de la familia en Barcelona.

Los árboles secos de Melilla


De aquellas podas, estos árboles

            Las podas de Melilla no son tales. Llegan cortan las ramas principales, dejan el tronco pelado y se van a otro lugar a hacer lo mismo. Los árboles pierden frondosidad y los melillenses sombra y frescura en las calles. Algunos árboles no superan esas podas nunca, o tarde años en recuperar el aspecto original. La Consejería de Medio Ambiente ha hecho de todo contra el arbolado de la ciudad.

                 La implacable hemeroteca muestra como en 2011 las propia Consejería dio la alerta al detectar un picudo rojo. Cuatro años después el picudo rojo acabó extendiéndose por todo el palmeral de la ciudad. No hay una sola área del Gobierno de Melilla que funcione con el mínimo de exigencia y eficacia admisible. La ciudad se nos está cayendo encima, y no es una frase hecha. Solo hay que ver lo sucedido en la barriada de Averroes, o lo que pasa día tras día con los edificios modernistas; u otras zonas paupérrimas de la ciudad, acerca de las que también hemos escrito.

                Se ven árboles secos por toda la ciudad. Ramas que se caen por toda la ciudad. Pérdida de masa arbórea evidente en el Parque Hernández y en el Lobera. Árboles pequeños, grandes, ancianos o jóvenes. Ninguno resiste estas podas y esta falta de buen cuidado y trato.   Insistiremos en todo esto las veces que sea necesario, incluso cada día, si es necesario.

    PD: Añadimos el trabajo del seguimiento de palmeras cortadas en el Parque Henández, en el blog de La Otra Melilla.

   http://laotramelilla.blogspot.com.es/2015/06/tala-palmeras-picudo-rojo-parque.html

Ante la agresión a Javier García Angosto


Javier García Angosto

Javier García Angosto

                   El 7 de febrero de 2002 publiqué un artículo con este nombre  en el ya extinto Telegrama de Melilla, cuando un amigo periodista fue amenazado con una paliza, por publicar artículos críticos contra determinado empresario melillenses. Hoy, un buen amigo del Alminar de Melilla, Javier García Angosto ha sido apaleado por una causa similar. La diferencia con lo sucedido hace 13 años es que todo quedó en unas amenazas verbales, hoy, pasado ese tiempo se ha traspasado ese límite, y el periodista ha sido agredido. Está claro que todo camina hacia un punto de no retorno, y los responsables de esta situación, las Autoridades Públicas, deben atajar estas acciones intolerables, y emplearse con contundencia contra quienes las llevan a cabo.

            Los periodistas nunca deben ser objeto de las noticias, y cuando lo son, no suele ser por buenos motivos. En Melilla hace ya tiempo que las diferencias y las desavenencias   políticas traspasaron el límite de lo tolerable, y de los éticamente admisible.

                                     A lo «joseantoniano». El Telegrama (07/02/2002)

                 Decía Jose Antonio Primo de Rivera, fascista y creador de Falange que: «Si nuestros objetivos han de lograrse en algún caso por la violencia, no nos detengamos ante la violencia…pues no hay más dialéctica admisible que la de los puños y las pistolas cuando se ofende a la Justicia o a la Patria».

                    A semejante salvaje, Jose Antonio, Melilla le sigue dedicando una de las calles principales de la ciudad , y si imaginamos que los nombres de las calles y monumentos que se veneran en una ciudad imprimen carácter, entonces debemos colegir que en Melilla siguen imperando el ideario de Falange, y que por ello resulta normal que nante una crítica periodística, o quizá ni siquiera eso, con la simple mención de un nombre en una crónica, sea motivo para que una persona determinada , se sienta herido en su honor y amenace con matar, aplastar a puñetazos o cualquier otra cosa parecida, al director de un periódico. En este caso  a un periodista.

                    Comunicado de la Asociación de la Prensa de Melilla
Ante los hechos que se recogen en el semanario La Luz acerca de una agresión al periodista Javier García Angosto La Asociación de la Prensa de Melilla quiere hacer patente su condena más firme.
Esta entidad denosta cualquier tipo de agresión y lo hacemos con más fuerza si cabe, cuando esta agresión la sufre un periodista en el ejercicio de sus funciones.
Desde la Asociación de la Prensa de Melilla defendemos siempre el diálogo y condenamos toda manifestación agresiva hacia la labor de los periodistas.
No queremos ni debemos olvidar que el trabajo del periodista está basado en ser fedatarios de la actualidad y ejercer esa labor no puede sumirse en una indefensión e intolerancia hacia lo que publicamos.
Vaya desde aquí nuestra condena mas firme y el deseo a Javier García Angosto de una pronta recuperación.

La lenta pérdida de árboles


  Pérdida de árboles en el Parque Hernández

           El centenario Parque Hernández, pierde frondosidad poco a poco. La única zona con sombra fresca y abundante es la Oeste, la lindante con la calle Luis de Sotomayor. Esta mañana han sido talados un pino o abeto de más de 60 años, y una palmera, muy atacadas por el picudo rojo. Este es el estado de la gestión Medio Ambiental de la ciudad. Los árboles ornamentales son solo eso, y lo centenario no se cuida como es debido. Los claros son cada vez más grandes y el sol africano se cuela implacable entre ellos.

          El Parque Hernández fue degradado durante décadas con las instalación de la Feria de Melilla en su recinto. A duras penas se reponía de la agresión durante el resto del año, cuando le volvía a caer otra encima. En el año 2010, según reza en una placa ya ilegible, el parque Hernández fue reinventado por una módica cantidad de algunos millones de euros, y declarado «parque del mundo». Cinco años después, olvidada ya la propaganda y borrado el texto de la placa que inmortalizaba la milenaria efeméride, la tala, la devastación y el picudo rojo; se adueñan de su superficie.

               Alguien preguntó, hace tiempo, no recuerdo si en en privado o públicamente a través del Alminar, si pensábamos que el parque había perdido masa forestal. Ahora respondemos que es claro y evidente que sí.  Las enredaderas de la imitación del jardín del Generalife no han llegado a prender, y el paseo está completamente pelado. Las otrora frondosas pérgolas son hoy solo un recuerdo de lo que en su día fueron.  También sabemos ahora qué ha pasado en la Consejería de Medio Ambiente en la última década.

                             Un estornino llamó mi atención de manera ruidosa al salir del parque, y hasta que no lo fotografíe no abandonó la verja. Quizá estaba avisando de la lenta decadencia de su parque. Ya empiezan a tener problemas hasta las aves. Las palmeras y los árboles serrados ya no se reponen. He podido contar al menos 6 muñones de antiguos árboles.

Nota:https://elalminardemelilla.com/2012/07/13/2012-odisea-en-el-modernismo/