Libertad sin fianza en Rusadir


 

   Interpretando un caso mediático

  Si conmocionó la apertura, extensión y dureza de la operación Rusadir (rehusamos del sobrenombre de Santiago), la revocación de las medidas cautelares ha causado perplejidad. La libertad sin fianza hace pensar que las principales acusaciones decaerán de aquí a la apertura del juicio oral, si es que llega a celebrarse algún día con algún acusado de renombre.

  A estas alturas  no había nadie que no pensara que la prisión preventiva se extendía demasiado, 71 días, y que la asignación de unas fianzas similares a las del Procés de Catalunya eran excesivas. Pero no cabe discutir las acciones judiciales,  solo recurrirlas por parte de las defensas, cosa que han hecho.

  Tenemos a mano un manual de Derecho para «no letrados«, publicado bajo el pseudónimo de Judge the Zipper (JthZ), y titulado Destripando el Derecho, que viene a ser un catecismo judicial para neófitos.

       Jueces y Justicia

   La politización de la Justicia es un hecho innegable porque muchas cuestiones políticas se deciden en los tribunales y porque se recurre a ella para que los dirima. Ya no sólo vale con refutar al adversario,  sino que además se intenta su condena en algún modo. Según JthZ «esto no afecta directamente a la independencia judicial», pero  añadimos que sí la contamina y altera. Los jueces trabajan bajo la presión política, social y la mediática y esto puede ser causa de excesos, errores, aciertos, desde nuestra óptica, pero los jueces rectifican reformando sus propios autos, como ha resultado en el presente caso.

      Una cuestión preventiva

  «La prisión preventiva es un medida muy excepcional que el juez sólo puede acordar en determinados casos y que lo normal es que los investigados permanezcan en libertad durante todo el proceso, recursos contra la sentencia incluidos», en opinión de JthZ, para que se determine este tipo de medida deben concurrir tres hechos, a saber: 1- Que el delito principal supere los dos años de prisión. 2- que existan sospechas fundadas de que se ha cometido ese delito. 3- Que lo solicite el fiscal o una acusación particular. El juez no puede actuar sin apoyos.

¿ Qué es lo que ha ocurrido en Melilla?  Hemos pasado en un mes de la prisión preventiva y de fianzas millonarias,  a la desaparición de todo eso. La única interpretación posible es que existan dudas razonables  sobre el delito más sorprendente: el de asociación criminal con fines delictivos. Algo que se veía como desmesurado, y que deberá probarse en juicio, de mantenerse esta acusación,  que no lo parece. La prisión provisional es algo que el juez debe motivar mucho, se escribe en Destripando el Derecho.

   La cuantía de la fianza debe estar en relación con la capacidad económica del investigado. No puede ser una segunda barrera y eso podría explicar su desaparición.

   Melilla, bajo la sombra de la corrupción

   Todo lo que llevamos de siglo hemos caminado bajo la sombra de la corrupción.  En el año 2000 fue detenido un consejero autonómico de Hacienda bajo esta sospecha, siendo finalmente juzgado y declarado inocente, con la anulación  de todas las pruebas que condujeron a esa imputación.  Las operaciones policiales de Ópera y Tosca (2014 a 2016) pusieron patas arriba el Palacio de la Asamblea, resultando imputados consejeros, cargos de confianza y funcionarios,  pero todo se archivó sin llegar siquiera a juicio.

     Resolución final

Nada se ha sustanciado en Melilla en todo lo que llevamos de siglo XXI, ni antes tampoco.  JthZ hace mucho hincapié en que a pesar de las imputaciones,  de la apertura del proceso, de la revelaciones filtradas a los medios, «la presunción de inocencia sólo se destruye con la sentencia» o con el reconocimiento por parte del acusado.

   Hemos detectado una desaparición completa de analistas oficiosos, de filtradores y de comentaristas, en los últimos días, como si nadie entendiera qué ocurra. Ahora solo impera el silencio.

  El lawfare es un concepto sometido  a debates e intervenciones muy amplias y difusas. Lo que existe es la instrumentalización de la Justicia por parte del mundo político. Todos quieren extender la influencia este tercer poder del Estado. Hay jueces instrumentales y políticos que son jueces, aunque lo prohíbe La Constitución. Para evitar esta y otras incomodidades se hicieron los reglamentos.

   El Poder político, sea cual sea, lo esgrime como recurso para crear zonas de sombra.  Es un concepto importado de Sudamérica, pero resulta difuso, salvo en que el Derecho se interpreta y utiliza como arma arrojadiza. Los delitos lo son o no en función del actor principal,  y de la posición con respecto a los mismos, no de los hechos.

  No sabemos qué ha pasado en Melilla en las últimas décadas,  aunque hayamos podido verlo y formar opinión. El mal tomó forma en 1997 y nombre en 1999, bajo las siglas del GIL (Grupo Independiente Liberal).

     

Melilla alcanzará los 10.000 votos por correo


En Melilla está afectado por la sospecha todo el sistema de votación, lo que no quiere decir que la mayoría de los electores que voten hayan sido corrompidos, ni muchos menos. Lo que afirmamos es que se compra, ceba o trufa todo tipo de voto, el de correo y el de mesa. Muchos de los electores que acuden a las mesas a votar también llevan su voto cebado. Por eso es tan importarte preservar el área de votaciones «de agentes extraños», de cientos de apoderados que pululan por las salas y que tiene ojos en todos lados, pero que se acercan a electores despistados y les ayudan a encontrar su nombre en el censo, a escoger la papeleta de su partido, y de decenas de otras acciones que contaminan el área de votación.

Desde el Alminar hemos colaborado en las elecciones de muchas maneras, como interventores de la administración, de partido, y también como apoderados de los mismos, y hemos observados esas «irregulares prácticas», como las de desordenar las papeletas, darles la vuelta, hacer que falten de un partido y de otro no, etc. Deberían existir también apoderados de la Administración, y no solo interventores. En muchos colegios melillenses el secreto de voto no existe, porque hay decenas de ojos que disimuladamente o no, observan de qué montón coges la papeleta. Luego es muy fácil llamar al interventor de mesa del mismo partido para que haga una señal sobre el nombre de ese elector. La presencia de apoderados de partidos debería está limitada en la áreas de votaciones, y eso que la mayoría son muy respetuosos, pero otros no.

El incremento incesante del voto por correo en Melilla

En 2019 escribimos esto: «Los presidentes y vocales de mesas designados por la Junta Electoral para presidir la jornada de votaciones son «mirlos» en medio de una legión de interventores, altamente cualificados para desentrañar, contar y escrutar cada nombre de su copia del censo electoral, que se corresponde con su mesa, sección y distrito«. En Melilla hay 80 mesas electorales, con dos interventores de cada uno de los dos partidos mayoritarios (PP-CPM) y uno del PSOE. Frente a ellos, solo existe un presidente de mesa y dos vocales que no repiten, mientras que los interventores de los partidos están más avezados que un veterano de la guerra de Iraq. La Administración debería formar grupos de voluntarios especializados en jornadas electorales, y que actuasen, bajo contrato, en el día de las elecciones. Se evitarían muchas cosas como está: «Hay un sencillo truco en el que no suelen caer el presidente de mesa y los vocales oficiales. Los votos por correo se introducen uno a uno al final de la votación, por lo que esa pequeña o gran masa de sobres queda en la parte alta de la urna. Los interventores analizan en milímetros el volumen que ocupan esos votos. Si el presidente de mesa no tiene la precaución de remover la urna, entonces los votos por correo quedan debajo y los efectuados en mesa queda arriba». A la hora del recuento, si no se ha hecho esta maniobra, los interventores de los partidos obtienen datos precisos sobre el voto por correo, y saben perfectamente si les ha ido bien o no, y si hay que seguir cebando este sistema.

El problema del voto por correo en Melilla

En Melilla están llamados a votar 55.109 electores, de los cuales 8.000 ya han solicitado su intención de hacerlo por correo, pero todavía hay plazo hasta el día 18 de mayo, por lo que la cifra final llegará con facilidad a los 10.000. Esto supone casi el 20% de la totalidad del censo, que elabora el Instituto Nacional de Estadística, desde su creación en 1946. Sin embargo, la participación electoral en Melilla suele situarse en torno al 60% (33.000 electores), lo que eleva el porcentaje de votación por correo al 38% del voto emitido en urna. El CERA o melillenses residentes en el Extranjeros son 5904, pero esos votos van directamente a la Junta Electoral y son allí recontados, por lo que están en principio libres de toda sospecha.

Cada voto cuenta, decía un anuncio de Coalición por Melilla pegado en su sede en 2019. Y cuenta tanto, que por en 2019 el Partido Popular salvo el diputado por 200 votos frente a CPM, y en 2008 por 400 frente al PSOE, en las Elecciones Generales de esos años. En las elecciones en curso, está en juego ser el partido más votado y pasar del empate técnico de los dos partidos hegemónicos, a una victoria suficiente y holgada que permita acceder al gobierno con un solo pacto o abstención pactada. El que consiga el bastón y cordón de mando, podrá manejar una cifra de 300 millones de euros anuales más las inversiones Estatales.

Es un auténtico maná del que están alejadísimas capitales españolas de parecida población o incluso superior. En Vitoria/Gasteiz donde hacen la ley, capital del País Vasco, tienen un presupuesto de 438 millones. En Granada 308 millones, en Almería 208. Cualquiera que viaje y vea estas tres capitales o muchas otras, se dará cuenta de que en Melilla el dinero se pierde más que el agua de la red de distribución. Hemos mencionado a Vitoria/Gasteiz, porque en la capital vasca los porcentajes de voto por correo son los más altos del Estado, desde las mismas fechas en que se empezó a incrementar el de Melilla. Toda esta información es consultable en la web del INE (www.ine.es), que tiene almacenados datos de participación electoral desde el año 1999.

¿Qué se puede hacer con el voto por correo?

El voto por correo es un proceso limpio desde que se solicita en Correos, se recibe en el INE y se devuelve la documentación necesaria a la oficina de Correos, con hoja de instrucciones o HIVRAE, y desde que Correos la remite al elector a su domicilio en carta certificada. Lo que no puede hacerse es invalidad este tipo de voto, como hacen los demagógicos, porque saben que es imposible e inconstitucional. El problema del voto por correo, o sea, su trufado para meter la papeleta correcta, sin equivocarse, se inicia en el momento en que el elector cebado tiene la documentación legal en su mano o domicilio. Es pues un problema individual, y de aquellos que le han estimulado (de cualquier manera posible) para que solicite ese tipo de voto.

Animar o estimular a alguien para que vote no es ninguna falta. El delito o falta es si se ofrece alguna recompensa individual o familiar (inclusión en alguna lista de empleo, concesiones de algún bien, o dinero en metálico) si se mete determinada papeleta, y por tanto se quebranta el secreto y la libertad de voto.

Hemos consultado la legislación de EEUU sobre voto adelantado o ausente, y es algo que permiten 46 Estados, excepto Alabama, Connecticut, Mississippi y New Hampshire. En todos se deposita el voto en unas urnas especiales, que permanecen custodiadas hasta el día de las elecciones. El voto anticipado debe hacerse siempre en persona. La mayoría de los Estados no requieren requisitos especiales para solicitar este tipo de votación. En Estados Unidos lo que se fomenta en la participación electoral, pero debe ser el elector que que se preocupe por su inscripción y acreditación. En España esto es lo que hace el INE.

En Estados Unidos los delitos electorales son federales: Delitos relacionados con el financiamiento de campañas electorales: por ejemplo, cuando los candidatos aceptan donaciones que no respetan las cantidades de dinero o donantes permitidos por la ley. Violaciones de los derechos civiles: incluyen casos de intimidación al votante, coerción, amenazas y otros métodos para suprimir el derecho al voto de una persona. Fraude de los votantes y fraude del registro electoral: por ejemplo, cuando alguien vota ilegalmente con el nombre de una persona fallecida o de alguien que se mudó. Usted tiene derecho a emitir su voto en privado. Existe una oficina Federal a la que comunicar cualquier irregularidad detectada, sospechas de fraude, intimidaciones y/o amenazas.

¿Por qué se roban votos es Melilla? Es un hecho absurdo, salvo que alguien quiera informarse sobre quién le está captando los votos por correo que pensaba que eran suyos. Por eso los han interceptado en tres puntos distintos. Lo que hay que procurar e investigar es que nadie interfiera en el proceso posterior al momento en que el elector recibe su documentación electoral. Una buena solución sería permitir la votación anticipada en la Junta Electoral de Zona, sin ninguna otra presencia que no sea la del elector.

Nota:https://web.larioja.org/files/pdf/comunidad/elecciones/instrucciones_envio_gratuito.pdf

Las elecciones en Roma


                                       

 Nihil novum sub Sole ( nada nuevo bajo el Sol)

           La oficina utilizada como factor de incremento en el apoyo popular
Una de las más llamativas características de esta oficina es que, si bien era una magistratura menor, muchos aspirantes a la política Romana la utilizaban como plataforma para la ganancia de apoyo popular y fama. Esto lo lograban pagando, de su propio bolsillo, fiestas y juegos monumentales. A lo largo de la historia hubo varios Ediles que explotaron esto en gran medida, y la cantidad de dinero invertido equivalía a varias fortunas.

Edil
Característica
Aemilius Scarus -Emilio Escaro- Pasa a la historia como el Edil que más dinero gastó, de su propio bolsillo, durante su término. Además de poner gran cantidad de recursos en el preparado de espectáculos, festividades y juegos también invirtió en la reparación de edificios, templos y gran cantidad de obras públicas. Estas obras le ganaron mucho apoyo ya que ofrecieron gran utilidad a la vida cotidiana en Roma.
Julio César En sus primeras etapas ganó gran parte de su apoyo popular gracias a la inmensa cantidad y calidad de juegos que realizó. (Pueden leerlo de manera detallada en la Biografía de Julio César.
Agripa Es considerado como el último Edil de importancia. Durante su término pagó con dinero propio la reparación de una inmensa cantidad de edificios y caminos. De hecho no tomó dinero del tesoro para sus tareas.

 

                           www.imperivm.org