El Alminar en los mares del Sur


 

               San José: La costa de los volcanes

     Todo lo que se escribe en El Alminar tiene relación con Melilla. Clara y evidente en muchos casos, y más oculta y no tan visible  en otros. San José es un municipio de Almería enclavado en el parque natural de Cabo de Gata-Nijar. Todo pertenece al término municipal de Nijar. Toda la costa, desde el mítico Cabo de Gata hasta San José es de formación volcánica. Hay arrecifes y farallones en muchos puntos de la costa, muy abrupta y difícil, tanto para la navegación, como para recorrerla a pie.

          No sé en qué momento del remoto pasado se formó toda esta costa, ni qué tipo de erupciones volcánicas la formaron. Lo que está claro es que en algún momento del remoto pasado, la lava ardiente se detuvo en esta costa y se enfrió hasta convertirse en roca.  Es una zona llena de historias y de leyendas. Son los mares del sur de España, en este caso de Almería. por aquí, camino del Estrecho, pasaron todos, desde el legendario Ulises hasta Hércules, de hecho, antes de recibir su actual nombre, el de Gibraltar ( Yebel Tariq); en honor y gloria del legendario conquistador musulmán de España, el Estrecho era conocido como «las columnas de Hércules».

                            Iván Sánchez y La Reina del Sur

          Iván Sánchez es un actor cuya carrera se inició en 2002. Desde entonces ha alcanzado gran fama y celebridad participando, entre las series más conocidas, en : Hispania, Hospital Central, Imperium o La Reina del Sur. Esta última serie, fue rodada en parte en la ciudad de Melilla. Durante dos semanas, los actores rodaron en nuestra ciudad, de la que Iván Sánchez guarda muy buen recuerdo. La serie está basada en la novela homónima del periodista, escritor y académico Javier Pérez Reverte, muy conocido en nuestra ciudad por haber acudido a ella en innumerables ocasiones, cuando era corresponsal de TVE. No vamos a contar nada más de él porque es de sobra conocido, solo que aceptó de muy buen grado posar para El Alminar de Melilla. Lo encontramos en un restaurante en la calilla de San José.

        Nota: http://www.ivansanchez.es/

El baluarte de San José


                    Una restauración que sólo dura 5 años

      Entre guerras, terremotos, reconstrucciones, derrumbes, las murallas de Melilla han aguantado, en algunas partes, varios siglos en pie. Sin embargo, las rehabilitaciones a las que se han sometido, no duran mas de 5 años y en algunos sectores ni siquiera eso. Apenas pasados unos años, algunas zonas parecen que no se hubieran rehabilitado nunca. Un ejemplo de esto es el llamado «baluarte de San José bajo», que fue rehabilitado en el año 2006 y reinaugurado por la entonces ministra socialista de Cultura Magdalena Álvarez, y hoy ya no queda ni la placa, porque un conveniente e intencionado golpe hizo añicos el recuerdo rehabilitador que se llevó a cabo con el dinero del «malvado gobierno socialista». Ese es otro tema del que hablaremos proximamente, porque este Gobierno de Melilla, está llevando a cabo las obras más grandes, como dinero del Estado o de Europa.  Ocurre que luego saben vender muy bien esa gestión y convencer a los ciudadanos de lo que hacen, aunque eso sí, cada obra nos cueste como si hubiésemos hecho tres cosas.

         El baluarte de San José bajo y todo el frente de Santa Ana y San Fernando, es lo que más recuerda en su aspecto a las antiguas fortificaciones musulmanas, es más, si se compara con otros frentes de la muralla,  éste tiene muy poco que ver  con el resto. Lo primero que lo distingue de otros es su forma trapezoidal procedente de la anterior fortificación musulmana. Lo segundo es que dentro alberga los restos de un antiguo silo de grano, de factura claramente musulmana o bereber, aunque luego está enteramente recorrido por las galerias de comunicación que llevaron a cabo los ingenieros españoles. Para mí es uno de los más llamativos e interesantes. En tiempos, estaba instalada a sus piés la antigua Comisaría de La Policía Nacional, y es una pena que al derribarla, las reformas se tragaran los contrafuertes de ladrillo rojo que lo sustentaban y que procedían, seguramente de la edificación de la Melilla islámica.

            Hoy, cinco años después de aquella obra rehabilitadora, está a punto de derrumbarse el amurallamiento de piedra que rodea el peñon rocoso sobre el que se sustenta, La recosntrucción es del siglo XVIII, pues anteriormente sufrió varios derrumbes por terremotos, aluviones del río y temporales.