El rigor en el vestido de …las mujeres


            

           Las mujeres, su indumentaria y la ortodoxia religiosa

    Desde hace dos años, se pueden ver paseando por las calles de Melilla a mujeres cubiertas de modo completo con el burka y el niqab, un tipo de indumentaria cuyo uso es fomentado por dos tendencias rigoristas islámicas (wahabitas y salafistas), aunque un autor del que hemos hablado recientemente, Angelo Ghirelli, fue el primero que habló de ellas en España y las describía como tendencias asociadas. La primera sería la fomentada desde el Poder (Arabia Saudí es un país wahabita), mientras que el salafismo es un movimiento popular sin implicaciones ni deseos de poder, aunque coincidan en la interpretación rigorista del texto islámico.  La vestimenta  ortodoxa islámica es muy visible, tanto en hombres como en mujeres, por su peculiridad y vistosidad. 

        Sin embargo, en Melilla se está incrementando el uso de la vestimenta ortodoxa en las mujeres de otras comunidades, como  la judía de Melilla, en donde las mujeres se empiezan a cubrir el pelo con redecillas y las piernas con medias. Sería algo mucho más difícil de reconocer aún en las comunidades rigoristas cristianas, en donde existen estos movimientos, pero en donde no parece haber un síntoma claro en cuanto a la vestimenta femenina. Lo que es claro, es que  en las tres grandes religiones monoteistas, se está produciendo un auge de la ortodoxia religiosa. Coincidiendo todas en en el intento de control sobre la población femenina. El fenómeno es más visible en una religiones que en otras, pero igualmente intentan extender su influencia hacia la sociedad. Una de las fotografías es de un grupo de monjas cristianas de clausura, comprando en una gran superficie de la capital. La Iglesia católica debería abolir las clausuras y eliminar para siempre ese tipo de atuendo en las mujeres, aunque se afirme que está solo circunscrito solo al ámbito religioso.

        Las últimas contrareformas que intenta llevar el Partido Popular en materia legislativa (matrimonio homosexual y aborto), están auspiciadas por la propia Iglesia y por los sectores de influencia más poderosos y ortodoxos  de la misma. Las normas morales escritas en textos de hace 5ooo, 2000 o 1500 años, no pueden imponerse de modo obligatorio sobre sociedades del siglo XXI. Siempre me asalta la misma duda al escribir todo esto, pues parece que al hacerlo todo se hace más hermético, pero dejar de escribir es como mirar hacia otro lado, aunque  el problema no deje de estar presente. Los conflictos puede aparecer en cualquier momento, y a mi me da la sensación, de que las barreras entre las comunidades melillenses se están levantando poco a poco.

                 Wahabismo y salfiah según Angelo Ghirelli

   Hay un libro de Angelo Ghirelle del que no había hablado, se titula. «Hombres, épocas, países»  y fue publicado en Barcelona en 1948.Está dedicado por completo al Islam.  Mohamed Ibn Abd el Uahab nació en 1703 en la región del Neyd (Arabia). Única región del mundo en donde se conservaba los preceptos primitivos del Islam. La relación tribal se mantenía inalterada. Nacido y educado en un ambiente de puritanismo religioso, Abd el Uahab propagó sus ideas de retorno al Islam primigénio. En su peregrinación por todo el territoria saudí, fue apoyado por la más importantes de las tribus del Neyed, la de Mohamed  Ibn Seud. Cuando la tribu de los Seud se hizo con el poder regional y finalmente consituyeron un Estado, la interpretación religiosa de Abd el Wahab se constituyó como religión de oficial. Esto ofrece una diferencia clara entre la práctica del wahabismo y de la salfiah, aun cuando doctrinalmente las diferencias sean casi inapreciables.

              El movimiento salfiah nació en la India musulmana y aunque no se apoya en el poder, como el movimiento wahabita, resulta aún más puritano desde el punto de vista religioso. Condena la música, el lujo suntuario, el culto de los morabitos y las cofradía religiosas. Al igual que los wahabitas, condenan toda innovación en materia religiosa. La expansión de ambas se confunden, aunque en el norte de África se desarrolla como movimiento salafiah, de raíz espiritual, democratico en el aspecto político y renunciando a la influencia política en la sociedad en la que se desarrolla. Esto es lo que decía Ghirelli en 1948.