Historia de un quiosco de la ONCE


¿Sirve de algo escribir? La observación atenta nos dice que sí, y algunas de las reacciones posteriores parecen confirmarlo, aunque la resistencia a los cambios o a reconoceros los errores, sea una tendencia irreductible en España, o en Melilla.  Han pasado cuatro años desde la peatonalización de la calle del General Pareja, primitivo emplazamiento del quiosco de venta de cupones y loterías de la Organización Nacional de Ciegos Españoles (ONCE), y del primer traslado del quiosco hasta la calle del General Chacel. Posteriormente fue llevado a la plaza de Héroes de España.

¿Cómo puede una organización como la ONCE desatender la situación de una trabajadora, e incumplir la normativa de Seguridad e Higiene en el Trabajo? No podemos responder a estas cuestiones, pero sabemos que conocen todo el expediente y la situación. La ONCE es una organización a la que nadie le va a negar nada.

Tras la peatonalización, el quiosco no volvió a su lugar de origen, en donde contaba con iluminación eléctrica, y fue instalado en uno de los emplazamientos más fríos y húmedos del centro, la esquina de la plaza, en donde según la estación del año, la humedad y el calor son extremos, o a veces ambas circunstancias.

  En el nuevo emplazamiento lleva ya dos años y está sostenido con trozos de ladrillos y tacos de madera, sin anclaje o fijación alguna. Tampoco tiene luz eléctrica y el trabajador o trabajadora debe iluminarse con una lámpara o linterna. Ya no se utiliza como punto de venta, porque incumple cualquier normativa de seguridad. Como dato, decir que la Delegación de Seguridad e Higiene en el trabajo  está a apenas 50 metros del artefacto.

  La trabajadora de la ONCE, una de las más antiguas de la ciudad, cumplió con todos los traslados, pero reclamó la reposición del quiosco en su primitivo lugar, algo que no ha sucedido pasado un lustro. Tampoco ha conseguido que sea instalada la conexión a la red eléctrica.

  En una de las ocasiones pudimos fotografiar al delegado actual de ña ONCE, hablándolo con la trabajadora afectada , y tomando nota de la falta de condiciones laborales del quiosco. La trabajadora titular,  y otros nuevos,  tienen sus puestos de trabajo en plena calle, expuestos a todos los rigores de la climatología melillense, sin protección alguna, o sea, a la intemperie. Todavía no está explicado el motivo del segundo traslado, desde la calle Chacel a la plaza de Héroes de España.

  La situación es incomprensible. Es una historia propia de un 29 de febrero, de esas en las que solo pueden escribirse cada cuatros años.

Nota:https://elalminardemelilla.com/2021/11/08/la-historia-del-quiosco-errabundo/

  

El primer círculo


Lo que nos sirve no lo sabemos. Lo que sabemos no nos sirve. A. Solzhenitsyn

El Infierno se compone de círculos, el Poder también. El infierno en el Poder consiste en quedar fuera de él, por eso se evita de cualquier modo. En La Divina Comedia de Dante, el primer círculo es el exterior. En el Primer Círculo de Alexander Solzhenitsyn, ese primer círculo son los Gulags, los campos de trabajo de Stalin, porque para el Nobel ruso, prisionero en esos campos, eran el mismísimo infierno, el infierno helado, como también se le conocía. Pero «el primer círculo» o círculo íntimo, es también el grupo de personas que rodean al líder, aquellos en quienes confía, porque el Poder es así. No hay amigos en el Poder, cualquiera del que se tenga que prescindir, se prescinde de él. Lo hemos visto suficientes veces, desde el regreso de La Democracia. Ninguna pareja política de amigos ha sobrevivido: Adolfo Suárez y Abril Martorell; Felipe González y Alfonso Guerra, José Mª Aznar y Mariano Rajoy; Pedro Sánchez y José Luis Ábalos.

Alexander Solzhenitsyn describe a los grandes nombres del círculo íntimo del stalinismo, casi todos ya olvidados, como el juez de jueces Abakumov, Poskrebischev, y tantos otros. Él, el camarada Stalin, el padrecito, no escribió nada personal por su propia mano, pero afortunadamente Solzhenitsyn sí, y de modo magistral. Sus obras tienen esa característica de las obras inmortales, la intemporalidad. Sus relatos, sus descripciones, no solo son rigurosamente exactas, sino que además conservan la actualidad. Seguimos viendo esos comportamientos en los personajes del Poder. Teniendo en cuenta que casi todos sus relatos fueron escritos en los periodos de reclusión en el Gulag, asombra la calidad de la narración y la precisión de los datos y hechos narrados. Nadie es insustituible en el primer círculo. Los servicios prestados no sirven de nada. No existe lazo o nudo que no pueda ser destado. No hay gratitud. El elogio es gratuito, pero la lealtad no. Todo se paga, en todos los sentidos.

El caldo gordo, la sopa de neutrones

En un núcleo (de según qué materia) la densidad es mayor, también la presión y las distancias son mínimas. El colapso de un átomo provoca alteraciones que en el exterior. El Parlamento es el núcleo de La Democracia, y las organizaciones políticas son sus elementos constitutivos, por eso las turbulencias parecen mayores vistas desde fuera, pero no ocurre nada que no haya pasado antes, pero con otros nombres. Lo que asombra en Solzhenitsyn, además de la potente ironía, es el sentido del humor, pese a escribir desde el mismo infierno. Sobran analistas airados y la crispación partidista.

Todo lo contrario de los autores actuales, los más leídos y escuchados, en los que todo es crispación, virulencia y antagonismo. Esto invalidará esos libros, esos testimonios, para el futuro, porque no podrán ser separados del contexto en el que fueron emitidos. José Mª Aznar sigue siendo un personaje hosco y airado, del que se duda que tenga amigos, o leales.

José Luis Ábalos pertenece al núcleo, al primer círculo. Esto está escrito y narrado por el propio Pedro Sánchez. Es uno de los cinco del coche, como se describe en Manual de Resistencia, que ni es un manual, ni habla de resistencia. Ya habíamos escrito acerca de este libro, que cobra un nuevo significado en la coyuntura actual. En realidad es la descripción del «círculo íntimo» del Poder, sus relaciones internas, la aparición y formación del propio núcleo, narrada por su elemento constitutivo, esto es, Pedro Sánchez. Eso es lo que diferencia a unos partidos de otros, su composición y su materia. Ábalos es un átomo importante. Deshacerse de él no va a ser fácil. Koldo García fue el custodio de los avales, que no de Ábalos, en la epopeya del retorno de Pedro Sánchez. Estaba en la sopa de neutrones.

Podemos y Ciudadanos desaparecieron cuando se desintegró su núcleo, bien en un proceso lento, caso de los morados, como muy rápido en el caso de los naranjas. Mas lento es el proceso del verde Vox, pero igualmente inevitable. Las dos estrellas masivas del bipartidismo, cual agujeros negros, devoran todo lo que está a su alrededor, el peligro es que colapsen y se desintegren. Los errores son los mismos, las respuestas casi iguales. Alfonso Guerra también sigue siendo un personaje hosco. En el Poder no hay amigos. Hay que resistir,  pero tiene que existir un motivo que no sea el propio Poder.

Barbate, el mar agitado


     La guerra contra el narco es sobre todo y antes que otra cosa, una guerra. Los defensores del Estado tienen medios, pero no los de última generación, ni siquiera se acercan a los utilizados por el ejército del crimen. Antes perder la vida o matar,  que abandonar la carga, ya sea droga o seres humanos. Ese es lema.

  La noticia de los agentes de la Guardia Civil muertos por la embestida homicida de de una narcolancha ha conmocionado a la opinión pública y quizá haya abierto algunos ojos, pero lo que está ocurriendo en la costa de Cádiz,  en las zonas de los Caños, en las desembocaduras de los ríos Guadiana y Guadalquivir es algo que conoce todo el mundo en la zona, y las fuerzas de seguridad relacionadas con la vigilancia del contrabando o del tráfico de drogas.

  En los últimos 5 años las noticias procedentes de la zona son inquietantes: se estrella un helicóptero de Vigilancia Aduanera, el apedreamiento de guardia civiles,  o el de agentes aduaneros atacados con piedras en el Campo de Gibraltar. Las muertes de agentes de servidores del Estado han sido varias. Es una actividad,  la del narcotráfico,  muy violenta. Todas las muertes se pagan o se cobran,  de una manera u otra. El pasado 1 de febrero moría el tripulante de una narco lancha en aguas de Cádiz

  David Pérez y Miguel Ángel Gómez han sido los dos últimos nombres en sumarse a la lista de agentes caídos en acto de servicio. No hace todavía un año del fallecimiento en aguas del Atlántico del oficial de Vigilancia Aduanera Carlos Esquembri, también el la lucha contra el narcotráfico. Ambos cuerpos (Guardia Civil y Aduanas) trabajan coordinada y conjuntamente en la lucha contra el crimen en la costa sur de España. Carlos Esquembri, que comandaba la patrullera Alcas desde su base en Almería hasta la desembocadura del Guadiana. decía que toda esta zona era más peligrosa y violenta que el propio Caribe, asociado desde siempre a la actividad de los piratas.

  La costa de Cádiz o la de Huelva son espléndidas para el verano, y para practicar deportes náuticos o el simple ocio veraniego, pero no son aguas tranquilas. Es normal ver desembarcar en sus aguas pateras con inmigrantes, ver a las lanchas de Salvamento Marítimo, helicópteros de la Armada, o descargar y recoger fardos de hachis y tabaco en las playas. Todo pasa en esta costa, pero desde hace mucho. Lo insólito es que se abran los ojos antes noticias tan tremendas, pero sin marcha atrás posible: la muerte de agentes de los Cuerpos de defensa del Estado. No es inusual ver narcolanchas, no demasiado escondidas, en playas relativamente concurridas. Si se combate al narcotráfico, y se expone a funcionarios a esta arriesgada e ineludible misión, debe hacerse con los mejores medios y dotación.

Roberte Saviano, el periodista italiano que mejor conoce las actividades del crimen organizado, ha avisado del traslado al sur de España de algunas de estas actividades. La lenidad de las leyes españolas,la no existencia de un mando único contra el crimen organizado, y la ausencia de un reglamento jurídico duro sobre la incautación de bienes del narcotráfico, nos convierten en un objetivo de las mafias de todo tipo y origen. Honor y recuerdo para los agentes caídos en la lucha contra el narcotráfico.