Tarde de ascenso en el Álvarez Claro


           En la tarde de Pentecostés, el domingo de la lengua de fuego, se presentó en el estadio Álvarez Claro el líder del grupo III de 2ªB, el Atlético Baleares, equipo de Palma de Mallorca, conocido con este nombre desde 1942. Juega en el campo federativo Balear de Son Malferit.

              Esta categoría de 2ª B fue creada en 1977 y dividida en 4 grupos por proximidad geográfica. La UD. Melilla pertenece a esta categoría desde su creación, no ha descendido nunca, pero sí ha participado en dos fases de ascenso consecutivas, en las temporadas 2010 y 2011 con García Tébar como entrenador. También participó en la liguilla de ascenso de 1999, siendo el entrenador López Caro.

            La tarde del domingo 9 de junio ha resultado agradable de temperatura y de viento, lo que ha facilitado el juego, frente a un campo de deportes lleno de melillenses dispuestos a jalear a su equipo, algo que sí han hecho; y a cantar un gol, lo que no ha sido posible porque el marcador se ha mantenido a cero.

             Los dos equipos se tenían mucho respeto desde el inicio del encuentro, y ninguno de los dos quería cometer errores en una eliminatoria a doble vuelta. Los dos equipos parecen de similares características, y el factor campo no parece ser decisivo cuando el nivel es parejo. El Atlético Baleares venía precedido con el dato de que no conoce la derrota desde el pasado mes de diciembre, aunque en Melilla también ha demostrado que le cuesta ganar y marcar goles. Las únicas ocasiones del partido han sucedido en la segunda mitad del encuentro, y han corrido a cargo del equipo melillense. El equipo insular no ha disparado sobre la portería local en ninguna ocasión. Está claro que venían a conservar el 0-0 inicial. El equipo titular de Melilla ha roto el cerrojo mallorquín en varias ocasiones, pero no ha podido marcar.

          Vuelve a quedar claro que la UD. Melilla es el equipo representativo de la ciudad, y el que congrega y suma todas las voluntades, sin distinción de ninguna clase. Cuando la temporada es buena, y los partidos necesitan de la presencia de su público, éste se congrega de modo masivo.  Hay que seguir exigiendo una apuesta decisiva por la cantera melillense, de la que ya han salido jugadores de gran relieve nacional, como Munir, o Borja Garcés, en la actualidad, y otros muchos en el pasado, como Ramoní o Totó.

              Todo queda pendiente para Palma de Mallorca y el Melilla puede ganar y alcanzar la final de la fase de ascenso. Entre 1950 y 1954, la UD Melilla (que ostenta este nombre desde 1943) jugó 4 temporadas en la categoría de plata del fútbol español. 

Anuncio publicitario