




Muhammad Ibn Abú Amir, Al Mansur, nacido en Torrox, gran Visir de Al Ándalus, el invicto, y al que los Trinitarios conocemos como Almanzor, utilizaba los tambores en las batallas, para provocar confusión y miedo entre sus enemigos, que podían ser todos aquellos que osaran desafiar su poder, tanto dentro del Califato, como entre los Reinos cristianos. Se mostraba igualmente implacable con todos. Sus aceifas asolaron la península durante dos décadas, hasta que unas heridas, o una enfermedad contraída en Calatañazor, le enfrentaron a la única batalla en la que no se vence, en 1002. Hay que tener en cuenta que en el año 1000 no se empleaban términos como musulmanes, islámicos, cristianos o españoles. La metáfora es que todo poder acaba, y que toda gloria encuentra su final. El error de Almanzor fue perder de vista que, aunque muy poderoso y eminente, era el visir, no el califa, y que sus acciones provocaron la unión de todos en su contra, acelerando con sus acciones el fin del califato de Córdoba, que apenas le sobrevivió 30 años. Esta es la primera parte de la parábola.
En febrero de 1939, las tropas de Franco rodeaban a Madrid, sin posibilidad de auxilio, salvo por el Norte. Barcelona había caído y la totalidad de los frentes eran ya estables. El gobierno estaba internamente dividido y no fue capaz de presentar un frente común antes de la caída definitiva, que se produjo en abril. Republicanos y comunistas libraron una cruenta batalla en las calles madrileñas, antes de entregar la capital y el resto de territorios (todavía en manos del Gobierno) al general Franco que ya daba muestras de impaciencia. El final no pudo ser más triste: la lucha intestina, antes que la unión frente al adversario común. Solo los socialistas, los militares republicanos y algunos anarquistas, fueron los últimos defensores de La República. Esta es la segunda parte de la parábola, que se asemeja bastante, a lo que estamos viendo en este último día de septiembre, con respecto al Gobierno de Melilla. De esto fuimos testigos el pasado Día de Melilla.
Los tambores de guerra se iniciaron el 17 de Septiembre
¿Puede un socio de gobierno (CPM), celebrar como éxito la admisión a trámite de una querella contra la Delegada del Gobierno en Melilla, sin resquebrajar la «supuesta unidad» y cohesión del mismo? En realidad se puede, y se ha hecho, lo que no puede es salvaguardarse ya, la unidad de acción. Pretender seguir juntos se torna imposible, y los hechos de marzo de 1939 lo demuestran. Cuando se acaben los tiros internos, las tamborradas y los cañonazos, ya no quedará defensa alguna frente al rival político. Y todas las fuentes próximas al gobierno de Eduardo de Castro, coinciden en señalar que la situación interna es mucho peor de lo que aparenta. En la situación actual, la derrota es segura.
Tras una atenta relectura de todo lo sucedido, desde El Alminar de Melilla señalamos el 17 de septiembre, 525º aniversario de la ciudad, como el del inicio de la voladura controlada del gobierno en ejercicio. Aquel día, importante por todo excepto por el fundador Estopiñán, el imprevisible discurso presidencial, resultó ser una granada de mano lanzada en medio de la sala de mando. La preparación y el contenido del discurso, correcto y gris hasta su explosivo final, estaba calculado al milímetro.
Al igual que en marzo de 1939 en Madrid, el todavía gobierno se dividió en varias facciones enfrentadas entre sí. Socialistas frente a comunistas, militares frente al gobierno y los anarquistas contra todos, pero contra los comunistas antes que contra nadie. Olvidándose todos de Franco, que esperaba enfrente.
La pretensión de un sector de Coalición por Melilla, de actuar contra la Delegada del Gobierno Sabrina Moh en los tribunales de Justicia, sin que ello conlleve una ruptura total con los socios socialistas, resulta tan vana como absurda. equivalente a la guerra parcial de Putin. En solo un día, ya ha arrastrado a un partido contra otro, como no podía ser de otra forma. El Partido Socialista defiende a su Delegada, y Coalición por Melilla arremete contra todo el PSOE, evidenciando que el problema ya no es Sabrina, a la que quieren ver caer como a Juana de Arco, o la Kahina, por utilizar símiles ambivalentes. Es más, la sensación desde el exterior, desde la posición observador que nunca abandonamos, es que se trata de una estrategia de tensión, que se va incrementando con cada acción.
A esto no escapa ni es casual, la alianza táctica con Compromís, o la permanencia en el gobierno del expresidente de VOX, o los apoyos tácticos como mayoría sustentante, tanto del diputado Jesús Delgado Aboy y como del disidente socialista Moha Mohamed Moh, del que no se sabe a qué grupo pertenece o en qué posición está. La estrategia y la táctica están ya claras: incomodar hasta el límite al Partido Socialista para provocar algún cambio, siendo el de la Delegación del Gobierno el objetivo principal, y en el que se están concentrado todos los esfuerzos, aunque ello equivalga al suicidio del gobierno. El que juega a la ruleta rusa, acaba encontrando la bala.
El diputado número 13
El objetivo principal es Sabrina Moh, el secundario Gloria Rojas, a la que se le ha sembrado una supuesta candidata alternativa a las primarias socialistas del 7 de octubre, en la que se dirime quién será la cabeza de lista a las municipales de mayo. No hay opciones, pero la candidatura forzada solo pretende medir los apoyos de Gloria Rojas, y no los de «la candidata nadie«, con todos los respetos hacia ella. Si la actual secretaria general no vence con una abrumadora mayoría, el segundo asalto se dirigirá contra ella. El objetivo es emparedar a los 3 diputados socialistas, y así Coalición por Melilla se las verá a vida o muerte, política, con su rival, pero no antagónico, que no es otro que el Partido Popular, de Juan José Imbroda.
La opción nuclear
Esta opción sería desintegrar el propio núcleo de la mayoría gobernante, y provocar la salida del PSOE del gobierno melillense, llegando a las elecciones de mayo en solitario, con solo 11 diputados. Es una opción arriesgadísima, pero no lo suficientemente descabellada, como para no intentarla en un momento desesperado. El presidente De Castro ya no se puede moverse de su papel de comparsa, y sustentarían esa exigua mayoría los dos diputados flotantes, contra la que el PP no actuaría, porque su única táctica ahora es no cometer un solo error. Sabemos que ya lo están viviendo, pero las tres diputadas socialistas van a vivir un auténtico calvario de aquí al mes de mayo.
Nota: Los ejemplos históricos que hemos utilizado no se corresponden con ninguno de los personajes en liza. Los mencionados por su nombre, únicamente lo son en el estricto sentido expresado.
El cañón es tremendo
«Todo reino dividido sera destruido» (S. Mateo 12.25)
Este se destruye solo, sin necesidad de intervención divina.
Pertinente análisis, se pueda estar más o menos de acuerdo. Y necesario porque se mira demasiado al paso corto y poco con amplitud de miras en esta ciudad. Nada la prensa. Si acaso Benzaquén, tipo de poco fiar como todos sabemos, por lo demás.
Así que gracias.
Pienso que las dos diputadas solicialistas están unidas por su pensamiento de que aprovechan más desde dentro que desde fuera, por lo que no me parece probable que dejen el gobierno. Digo dos porque la titular de Bienestar Social no es nadie. Ni dentro ni fuera de la Consejería ni del partido. Es una de las constantes de la política local. Dentro se suele funcionar bastante desde el fanatismo y no desde la lealtad. Quien lidera manda. Y se va limpiando de posiciones díscolas. Así que no esperes gente dentro de los partidos que construya cuestionando al líder y eso crea una pátina de mediocridad importante.
Ni siquiera valientes, como el autoinmolado Lence, que despierta simpatías no por lo que representa, un político conservador sin aliciente en lo intelectual, sino por atreverse a plantear su vía ante el desembarco vengativo que está inminente por parte del Capo sumo.
Y fuera del partido, la consejera Maeso -como Flores ahora en las primarias «socialistas»- no es nadie y no van a tener ganas ni interés en construirse ahora un currículum político ni social para serlo. Nadie espera qué es lo próximo que tendrá que decir sobre cualquier cuestión relevante para la ciudad, cuál es su aportación o qué medida va a poner en marcha. No existe.
Y el PSOE seguirá atrincherado hasta el 28 de mayo en todas sus posiciones, incluyendo Sabrina, que últimamente está ya dejándose ver más en cosas de partido, cuando realmente nunca fue política.
Si se van del gobierno dejarán de manejar dinero y en la históricamente viciada forma de conducir Consejerías en este pueblo, eso supone el ostracismo. No tienen tanto capital ganado como para vivir de las rentas y ese pretendido y cosmético ejercicio de dignidad te lo compraría nadie luego en las urnas.
Eduardo lo tuvo claro desde el principio. Su contribución era acabar con Imbroda, gracias siempre, pero las hienas de toda dirección no le iban a dejar tener ni un gobierno personalista para el que no le salía cuenta alguna ni mayor presencia que la de un simple árbitro. Acabar con Imbroda en su primera etapa, se entiende. Ahora viene el remake en brazos de VOX desde mayo 2023 que nos va a dejar tiritando.
El partido de Moha está claro. Él. Probó las mieles y no va a cejar hasta recuperar el lugar que su soberbia le indica que merece. Ahora mismo tiene pinta de que está jugando sus cartas fuera de Melilla para no perder el cordón umbilical como hizo Amín y que cuando Gloria se canse, o un pésimo resultado la eche, ponga su verbo tan florido como desinformado a escalar posiciones en un partido descabezado. Él como tantos, sabe que periódicamente «los suyos» pillarán cacho en Madrid y que si Sabrina logró ser nada menos que Delegada, a él le va a tocar una vida trufada de regalitos.
De Aboy, poco más. Animal político, está desgastado por su juicio, aunque últimamente está muy subido…igual las influencias siguen siendo más importantes que otra cosa, oh sorpresa. Pero cerradas las puertas del caballo ganador en Melilla que es VOX, por solitario no conseguirá nada y apurará hasta el último día, consciente de que le va la justicia en ello.
Bienhallado Icono. He intentado poner sobre la mesa las tres únicas opciones existentes y que nadie se atreve a mencionar. A estas alturas ya da todo igual. La concepción estratégica y táctica, en este movimiento contra Sabrina, es nula? Es más bien la demencia de Sansón: tirar el palacio abajo, aunque me lleve a mí por delante. La cobardía es máxima, porque no se atreven a llegar hasta las últimas consecuencias. Son perturbadoras patadas en la espinilla.
Sé también que en Madrid, en Ferraz, no van a permitir un movimiento así, y menos en un territorio tan sensible como Melilla, pero yo dejaría el gobierno, dando un plazo máximo de 7 días, dejando a algunos bailando en solitario en su propio akelarre. Los restos del gobierno querían prácticamente en funciones y sin poder decidir en qué gasta, salvo en sellos.
Lo peor, es que Moncloa, que ya tiene sus propios incendios, se decidirá por la opción pero, o sea, dejar que estas tres mujeres se consuman hasta el último día, quedando ya inservibles para la posteridad. Los augurios son negros.
Conociendo a la gente de Melilla y sabiendo que mentalmente somos pueblerinos, con sus pros y contras, en estos casos de «persecución política» y otros que hemos ido viendo en diferentes sentidos y direcciones entre diferentes partidos se puede llegar a la conclusión de que «no es nada personal, sólo son negocios». Esa idea romántica de la ideología es sólo la fachada los partidos para atraer a la gente, la realidad es que los partidos políticos, todos los que tienen alguna aspiración de gobierno, no son más que proyectos con afán de lucro. Y toda actividad con afán de lucro atrae a todo tipo de estafadores, timadores y mafiosos, todos ellos disfrazados de empresarios, gestores de ONGs, responsables de instituciones académicas, empresariales, sindicales, judiciales, etc.. Lamentablemente, en esta ciudad cuando más mugre mafiosa sea capaz de atraer un partido político, más votos tendrá.
Existen personas con ideología y preparación que están pegadas a diferentes partidos, pero por lo que he comentado en el anterior comentario. Los partidos tienen un afán de lucro, si participas es porque eres capaz de generar capital dentro de ese partido sin importar si el método es legal o no. Si sólo aportar ideología, conocimientos y tienes escrúpulos huyendo de «zonas grises», tus compañeros y compañeras de partido con «más tablas» simplemente no compartirán contigo «el secreto», o te puedas ver metido en asuntos que nunca te has imaginado que pudieran existir. En esencia ese es el sentido de los partidos, en general, y supuestamente, claro.
Teniendo en cuenta esto, quien se acerca a un partido es por una de estos dos motivos, fundamentalmente:
1- Quiere una fuente de ingresos que derive de ese acercamiento (empleo, un contrato para su empresa, etc.) Hay empresas-personas que son más de 1 sólo partido, y hay otras que tienen la habilidad de moverse entre diferentes y ser amigo ser que gobierna, y eso es porque la contrapartida es jugosa para esos partidos concretos, les gusta lo que les ofrece esa empresa-persona.
2- Que siente esos colores del partido pero que ignora (o no) cómo funcionan los partidos. Son los fans incondicionales, da igual de lo que acusen al partido al que pertenecen, que siempre son mentiras, ello no se lo creen. Y si les muestras pruebas evidentes la excusa es que es que en el partido rival hacen peores cosas.
Los partidos se usan como las fundaciones u muchas ONG, son una forma de actividad con afán de lucro. Que alguien diga que un partido en esta ciudad es para promover una u otra ideología, es cuanto menos decir medias verdades o simplemente no entender cómo se cocinan las cosas dentro de uno. Donde antes de muchas «ejecutivas» lo que se va a debatir ya ha sido mascado y preparado en otras reuniones en domicilios con personas que nadie ha elegido y que pocos saben que tienen esa función, o el poder real que tienen.
Al ser la ideología sólo una fachada de los partidos, esto permite que en petit comité muchos dirigentes «rivales ideológicamente» puedan reunirse en secreto y nunca hablan de contrarrestar ideologías porque no la hay, no la sienten realmente. Sólo hablan de sillas, de sillones y de dinero. La revalidad real que existe es la que puede existir entre dirigentes de diferentes empresas de un sector económico concreto que se disputan un territorio.
Y claro, todo esto supuestamente.