Melilla, Pedro de Estopiñán Torre de los Guzmanes, Conil de la Frontera Medina Sidonia
¿Quién fue nuestro fundador, qué sabemos de él? Casi nada y eso que ninguna otra persona tiene dedicadas más edificios, calles, acuartelamientos, cooperativas de trabajadores, clubs deportivos o incluso colegios, a su nombre. Pese a todo, no existe un galardón con su nombre que reconozca a quien se dedique a la investigación histórica seria sobre el pasado de Melilla.
El Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) fue una creación del Opus Dei, de hecho ellos fueros sus primeros gestores. Antes solo existían el Instituto de Estudios Africanos , y el Instituto General Franco para la investigación hispano-árabe.
Resulta muy indicativo que tengamos que recurrir a estos dos últimos Institutos de investigación, para intentar averiguar algo sobre la figura de la figura a la que se atribuye la conquista de la ciudad en 1497.
Hipólito Sánchez de Sopranis escribió una aproximación biográfica a nuestro legendario personaje, en 1953. Los Estopiñán son una familia cuyo patrón es Remón de Estopiñán el viejo, al que el autor califica como el primer linaje indígena de la provincia de Cádiz. Pedro de Estopiñán pertenece a una rama secundaria de la genealogía, en su cuarta generación, y era hijo de Ramón de Estopiñán y doña Mayor de Virués.
Dentro de una prosa grandilocuente y fantasiosa, no podemos aclarar si nuestro fundador nación en Cádiz o en Jerez de la Frontera, ni siquiera su fecha de nacimiento. El autor solo pudo documentar la presencia del padre como Jurado en Jérez, en las posibles fechas de su nacimiento. En 1489 nació el primer hijo de Pedro el conquistador, por lo su nacimiento podría situarse en la década de 1460. En 1496 sí era el contador oficial de la casa de Niebla, lo que sí indicaba cierto prestigio social y posición. Su hermano Bartolomé sí participó en la conquista de Las Canarias, entre 1480 y 1483.
El conquistador tenía otros dos hermanos, Servando e Isabel. Él contrajo matrimonio con Beatriz Cabeza de Vaca, con la que tuvo al menos 5 hijos. Fue hombre de más fama que riqueza, porque los sueldos en aquellos tiempos no solían ser altos. Probablemente la organización de la conquista sí estuvo a su cargo, quizá la dirección técnica, pero no la realización del plan, algo mucho más complejo. En su elaboración sí suena nombre muy significados en la historia de España, como Martín Galindo, Martín Bocanegra o Ramírez de Madrid, el marido de La Latina.
Consta su presencia en una almadraba atunera de Conil, en donde participó en el apresamiento de una galeota de moriscos, que intentaba arribar a las costas gaditanas. Los pocos datos recopilados sobre su biografía consolidan más el perfil de consejero más que el de militar. Su vida era muy poco pública. Tras la conquista de 1497, todo parece oscurecerse, aunque se sabe que se dedicó a la producción y venta de vino, pues tenía viñas propias. Organizó otras expediciones, como la de Salses, y también participó en el viaje a Flandes en 1505, para tomar contacto con los nuevos soberanos de Castilla (Juana y Felipe), tras la muerte de Isabel I o la conquista de Mazalquivir en 1505, que resultó desastrosa en el aspecto económico.
¿Se arruinó aquí el conquistador de Melilla, comprometiendo su posible fortuna en esta última empresa? Los datos muestran que murió repentinamente en Guadalupe (Cáceres) a finales de 1505, dejando a su Beatriz, su viuda e hijos en una difícil situación económica. Hubieron de vender propiedades y haciendas para cubrir las deudas . Beatriz, tía del fututo conquistador Alvar Núñez Cabeza de Vaca (que explorara y anexionara para la Corona española todo el sur de Norte América, desde Florida hasta California) fue amparada por familiares y contadores que liquidaron sus deudas, estableciéndose de modo definitivo en Jerez de la Frontera.
En la investigación histórica suele decirse es que si un documento no aparece es porque no existe o fue destruido. La historiografía franquista removió cielo y tierra para documentar la vida y milagros del conquistador Estopiñán, pero no hallaron nada más. Lo más probable es que su prematura y no aclarada muerte, llevara a los cronistas oficiales de la Casa de Niebla y a la de Medina Sidonia, a otorgarle un papel superior al que en realidad tuvo, en la conquista de Melilla, como privilegio póstumo.