El VI Recinto de Melilla


La puerta de la ciudad desaparecida

  La niña le miró a los ojos y con una voz casi inaudible, salvo para unos oídos acostumbrados, dijo: – Padre, a veces veo muertos-. Sin inquietarse lo más mínimo, le preguntó: – ¿Dónde, hija? – En el sexto recinto-, fue su lacónica respuesta.  Le pasó cariñosamente la mano por la cabeza, y él afirmó: -«Eso es imposible, mi niña, solo hay cuatro».

   En el año 2012 se iniciaron las obras del centro tecnológico,  en total desconocimiento de lo que pudiera encontrarse bajo el suelo. Esto lo escribimos en el Alminar en su momento.  Solo la insistencia,  en solitario, de este blog, forzó la conservación de ese paño de la muralla del fuerte de San Miguel,  a la que el Cronista Antonio Bravo, denominó como «camino cubierto de San Miguel «. Desde ese año, el resto del fuerte histórico de San Miguel y del Rastrillo de Espadas,  se han ido deteriorando sin remedio,  ni solución. El lugar tiene un inconfundible y penetrante olor a orina y heces humanas.

La línea de defensa en 1700

  La línea de defensa en 1700, año de la muerte de Carlos II, el último Austria español,  la constituía el baluarte de San Fernando y el foso de los Carneros. Pero la línea de defensa es también la de ataque. Los españoles intentaban alejar lo más posible esas líneas de defensa y también ganar terreno para huertas.  La Guerra de Sucesión dejó a Melilla y su defensa en un 2⁰ plano político,  y en manos de la intuición de sus alcaides y gobernadores. Por fortuna para todos,  estábamos en manos de las mejores cabezas, como Blas de Trinchería, o Martín Zermeño.

  La zona se conquista y edifica a partir de ese año, y estará culminada para 1717, cuando los rifeños asedian el fuerte de San Miguel,  pero sin éxito.  Este fuerte, que quedó arruinado, se edifica a su vez sobre las ruinas del fuerte de San Marcos, que por entonces era solo un amontonamiento de piedras y barro. Suponemos que todo eso se produce sobre el nivel de suelo conocido, en donde están los restos de los muros actuales y los del Rastrillo. Entonces, ¿ Qué es lo que vemos a tres metros bajo el suelo?

  La ciudad desaparecida

  San Miguel, San Carlos, Victoria y Rosario son fuertes que se extienden hacia la cota alta de la colina o cerro de la Alcazaba, zona recurrente de hallazgos arqueológicos,  y enterramientos humanos,  que jamás se han mostrado a los melillenses.  Todos esos fuertes se edifican sobre el nivel de suelo existente, que es el que vemos, porque nadie entierra un fuerte defensivo.

  Aquí vemos lo que pudieran ser muros anteriores a la presencia española, cimentaciones de muros. También podría tratarse de túneles y galerías,  pero entonces para nada servirían las puertas y ventanas que hemos visto bajo tierra.  La ausencia de noticias ratifica que lo descubierto no está en los mapas, ni estaba en las previsiones, como pasó en la iglesia de La Purísima.

  Cada día aparecen noticias sobre descubrimientos arqueológicos en cualquier ciudad española que se encuentre en obras. En Melilla no se comunica ni pública de forma oficial  nada, ni pasados los años, como los silenciados muertos del IV Recinto. Este es el VI, el que está bajo tierra, y que todavía no existe. Entre muro visible desde el exterior y la construcción oculta, existe una zona de sedimentación de terreno, lo que llevaría a una datación muy diferente entre la parte alta y la baja, de al menos dos siglos, si no más. Las ciudades se superponen, y unas construcciones se levantan sobre otras anteriores. Esa es la ley de la Historia.

Han pasado 13 años desde el primer hallazgo, el de la aspillera. La zona histórica está en una estado ruinoso y maloliente. Imaginamos que se esperaba que todo se viniese abajo por la propia inercia, pero esto ya lo cambia todo. Esta zona registró dos siglos de combates, los vestigios, incluso humanos, deben ser abundantes.

Nota:https://elalminardemelilla.com/2012/04/11/hallazgo-en-el-fuerte-de-san-miguel/

La historia desmoronada


              Al iniciarse la obras para la construcción del Centro Tecnológico en 2012, aparecieron los restos de un fuerte español en el borde bajo del 4º Recinto defensivo, junto al hotel Ánfora. Nunca le tuvieron demasiado aprecio a estos restos, en realidad les estorban, pues suponían un engorro en la mitad del camino hacia una nueva obra magna.

                        Nunca hubo un reconocimiento oficial del hallazgo, en realidad casi nunca los hay, ni tampoco fue ocasión de nuevos y eruditos artículos sobre las antiguas fortificaciones españolas. Eran una ruinas molestas, en medio de un problema aún más molesto, el de la churrería de la antigua estación de autobuses, que cuatro años después, singue sin solución y en el mismo lugar al que fue desplazada de modo provisional.

                       Todo ya está escrito muchas veces en el blog, en realidad cuatro años dan para mucho. Hemos repetido la historia del antiguo fuerte de San Miguel y la de la churrería hasta la saciedad, y todo sigue abandonado, paralizado por el tiempo y por la ineficacia de la gestión. La zona presenta el estado de abandono habitual de toda la ciudad, refugio nocturno para actividades que no pueden ser descritas, pero que dejan rastro físico.

                   ¿Pueden alcanzar unas ruinas históricas un estado mayor de ruina?. En nuestra ciudad sí, el de desmoronamiento por sí mismo. En realidad nunca tuvieron el más mínimo interés en excavar en esta zona, por lo que pudiera aparecer. No es una zona fenicia, pero aquí, en este extremo o vértice del triángulo, acababa España hasta 1863. Más allá de este punto se encontraba el «campo exterior» o «campo moro».

                   Esta ruinas, salvadas a su pesar no estar conservadas, se dejaron tal cual estaban, para que la acción de los agentes erosivos acabaran la labor que las piquetas y las excavadoras no pudieron llevar a cabo. Hay una parte de la muralla conservada que está desmoronada y que puede caerse en cualquier momento, con el consiguiente peligro para quien transite por el antiguo rastrillo de espadas.

                Es una maniobra muy hábil, la de dejar que los cuatro elementos de la naturaleza acaben con aquello que nunca quisieron conservar.

        Notas: (1)https://elalminardemelilla.com/2012/04/29/el-camino-cubierto-de-san-miguel/   (2)https://elalminardemelilla.com/2012/01/09/la-churreria-olvidada/

Silencio sobre un fuerte español


          Como dijera San José Mª Escrivá de Balaguer: «Bendita la perseverancia del borrico en la noria». Cuando hicimos la primera entrada sobre el hallazgo de lo que pudieran ser los restos del Fuerte de San Miguel el pasado 11 de abril (https://elalminardemelilla.com/2012/04/11/hallazgo-en-el-fuerte-de-san-miguel/), nunca imaginamos que casi dos meses después, nadie fuese capaz de expresar la más mínima opinión sobre este hallazgo, sea importante o no. Lo peor es que el futuro Centro Tecnológico de Melilla lleva dos meses paralizado, y en los medios de comunicación de Melilla no se ha publicado ni una solo línea, información u opinión, ni sobre lo aparecido, ni sobre la paralización de los obras. La Ley Mordaza impone un cerco de hierro impenetrable.

          La información circula en redes sociales, en blogs, en «petit comité», o si uno es afortunado y tiene contactos, un pequeño soplo suele ayudar bastante para orientar las indagaciones. Para tranquilidad de «la nomenclatura» diré que hasta El Alminar ya se atreve a acercarse cada vez menos gente. Las consignas de guerra están funcionado: «No vayas allí que te lían.., ten cuidado con acercarte a.., lo manipulan todo.., la verdad nunca está ahí fuera.., se vive mejor entre las paredes de la nomenclatura.., el invierno llega y es frío.., tened cuidado y cerrad todo para que no puedan fisgar..».

      No da igual. Tenemos todos fotografiado. Existen nuestros gargantas profundas. Hay gente que nos envía cosas a través de mails absolutamente anónimos. Hay paredes que no tienen puertas, casas que no tienen tejado, puertas que no tienen paredes y somos como el agua, siempre nos abrimos paso. Corremos riesgos en busca de nuestros objetivos, nos arrastramos por el lodo si es necesario, o nos subimos a alturas inverosímiles. Hasta ahora la fortuna está de nuestro lado, nos protege y sobre todo, corregimos nuestros errores.

          Volvimos al fuerte de San Miguel para corroborar si lo que había dentro de una de las aspilleras era una bala de cañón y para ello hicimos las fotos más cercanas a nuestro alcance.  Era solo una azada, pero lo que hubiésemos dado por que fuera una bala de cañon. Esta mañana había allí ingenieros topógrafos haciendo sus mediciones, no sabemos con qué fin. Expertos dicen que los cimientos de ese fuerte, son a su vez los de otro fuerte más antiguo. Esos sí serían importantes. No busquen nada de esto fuera de El Alminar.

       Nota: Solo el blog de mi amigo Carlos Esquembri ha publicado algo sobre este extraño asunto: http://surdealboran.blogspot.com.es/2012/06/los-restos-del-fuerte-de-san-miguel.html

El Alminar desde el cielo


        Fotos desde el aire de zonas del casco histórico de Melilla 

       Las contínuas dificultades para fotografiar zonas cerradas, áreas restringidas, obras en las que no se permite el paso, o simplemente para fotografiar las cosas desde otra perspectiva, obliga a una búsqueda constante de nuevos modos de ver aquello que está frente a nosotros y que habitualmente pasa desapercibido.  Asaltar la realidad, mirar en donde otros ha mirado y ver lo que otros no han visto, o simplemente prestar atención a aquello a lo que nadie se la presta.

          Se corren riesgos, no suele gustar este tipo de actividad, y ya se sabe que cuanto más alto es el alminar, más se llama la atención del enemigo. Hace exactamente un año no éramos nada, solo un proyecto, una idea. Un blog más entre cientos de miles. Es mucho lo que nos amenaza, hay maniobras más oscuras de las que nadie imagina en contra de El Alminar. Aquí se escribe todo, con nombre y apellido y a la vista de todos, o del que quiera verlo. Por eso, hemos decidido no sacar nunca a la luz, a aquello que habita en la sombra y cuyo alimento es la oscuridad.

        Hoy colocaremos a la vista de todos, omnes gentes, una serie de fotografíss obtenidas desde el aire.  La vista  del tejado completamente demolido de la Cámara de Comercio, una fotografía de la escalera, único elemento que han decidido proteger en la Comisión de Patrimonio del Ayuntamiento de Melilla, y la vista total de la superficie en donde se va a construir el Centro Tecnológico, para que se aprecie la barbaridad que ha supuesto autorizar, en una zona histórica y arqueológica, un edificio de semejantes características. Una fotografía de la Casa Lafont sin tejado y cuyas pinturas no se sabe si fueron conservadas o no.

         El Alminar es un elemento arquitectónico  alto, pero sus cimientos están en el suelo. No perdemos de vista esa situación, y por es Alminar el nombre de este blog. Mientras sea más y mas poderoso lo que nos protege que lo que nos amenaza, sobreviviremos.  En cualquier caso, nada es eterno y El Alminar tendrá su fin, porque como dice un proverbio árabe: «Incluso el Sol se pone».  

     Nota: El Alminar se está preparando para una interrupción prácticamente total de su actividad, desde el día 10 de junio, hasta el próximo 10 de julio. Dejamos tras de nosotros un mundo con 600 entradas y más de 3000 comentarios. Para que todo pueda seguir es necesario renovarse de modo constante, aunque a veces esos cambios resulten imperceptibles.

Centro Tecnológico paralizado


   

      La aparición de restos históricos compromete el Centro Tecnológico

      Las tres grandes obras que se estaban llevando a cabo en Melilla están paralizadas: Hospital nuevo, Edificio Educativo y Centro Tecnológico. Las dos primeras por problemas presupuestarios, la tercera porque nadie comprendió cómo se autorizaba una obra en un  suelo tan sensible desde el punto de vista histórico. Existe un supuesto filtro que es la Comisión de Patrimonio, que debería haber evitado un riesgo así. No se debería haber autorizado esa obra en ese lugar. Toda esa zona debería haber entrado en un Plan Arqueológico de Melilla y dedicarse solo a rehabilitación y excavaciones. Ahora hay un problema grande del que nadie habla y me sigue resultando asombroso, sobre todo, cuando han aparecido los restos de un fuerte español del siglo XVII. Excavar en ese suelo para hacer una carretera de acceso o para realizar cimentaciones o sótanos, solo hace aumentar la posibilidad de seguir hayando más cosas, más importantes, de otros periodos históricos y entones la paralización podría ser definitiva y el fiasco absoluto, porque habría que buscar un nuevo solar para el Centro Tecnológico y convertirían en humo los 120.000€ adicionales del solar expropiado, todavía no sabemos a quién. Van cerrando cada vez más el área, pero todavía hemos podido hacer fotos más cercanas y definidas de la aspillera del viejo fuerte de San Miguel, que como siempre, compartimos en El Alminar.

   Nota: Sigue sin resolverse el problema de la churrería.

La aspillera del fuerte de San Miguel


               Decididamente hay algo que nos guía. Un pequeño soplo, una leve sensación de tener que ir a un sitio preciso. La intuición de que hoy era la última oportunidad. Un día festivo. las guardias suelen estar bajas.  No había hecho fotos nuevas desde el pasado 11 de abril, hace casi un mes. Desde aquella incursión toda ha cambiado. Se ha demarcado la zona con valla metálica. Se han colocado los preceptivos carteles de: «Prohibido el paso a toda persona ajena a la obra». Sin embargo, en la zona que alguien indicaba en su comentario, como la del «Rastrillo de Espadas», no habían completado el vallado, entre otras cosas porque están sacando escombros y porque además vive gente, ese es el acceso a una vivienda. No siempre pueden cerrar todo. Están demoliendo un muro y allí existía una  casa que ya derribaron, quizá la expropiada por solo 120.000€, por cierto: ¿A quién se la expropiaron?.

         Sin penetrar en la obra, sin incumplir ningún mandamiento legal, subido a una pequeña montaña de escombros, obtengo las mejores fotografías posibles. Tampoco se puede demorar uno mucho,  porque la red de alerta temprana se activa de modo lento pero total. En cuanto se publiquen las fotografías, el cerrojazo será absoluto. Completarán el vallado, cubrirán con tela la verja para que no se sepa lo que sucede allí dentro. En la parte baja del solar han empezado a colocar pilotes. La obra no se detendrá ante nada. Este muro iba a ser demolido de modo completo, se había declarado de poco o nulo valor histórico. La superposición de materiales no indicaba que existiese un valor específico que indicase el derecho a la protección. Los expertos habían hablado. No esperaban encontrar esa aspillera. Seguimos sin noticias o explicaciones oficiales. En una de las troneras se apreciaba la existencia de una bola de hierro, en la contigüa parecía que también. Las han podido encontrar en los últimos días y las han dejado allí, o quizá ya estaban. 

            Mostramos todo lo que encontramos.   Contamos todo lo que sabemos o nos dejan saber, que no es lo mismo. Tenemos muchas más fotografías. Han destrozado bastante. Mostraremos lo que se hace en otras ciudades. La comparación siempre es en nuestra contra y en detrimento de nuestra historia.

El camino cubierto de San Miguel


          

                  Desde que diésemos la noticia del hallazgo de un muro aspillerado en el solar del futuro Centro Tecnológico, no se ha ofrecido a la ciudadanía de Melilla la más mínima información sobre lo encontrado. No sabemos si lo encontrado compromete el futuro de las obras, si se están haciendo excavaciones o si se ha encontrado cualquier otro tipo de restos. Toda esa zona está muy batida, muy removida por la historia. Los llamados 3er y 4º recintos defensivos fueron vitales para la supervivencia de la ciudad a lo largo de 400 años. Permitieron controlar el espacio colindante, la creación de huertas de donde proveerse de leña, de  víveres, pues estos no siempre llegaban puntualmente de España. Sirvieron también como franja de seguridad y a la larga, resultaron vitales en el asedio de 1775. Si esa zona defensiva, Melilla hubiese caído durante ese asedio como un higo maduro.

          Los fuertes, sus barracones, e incluso sus murallas, entraban dentro de lo que hoy es la Plaza de España, lugar en donde se ubicaba lo que se denominaba como: «Puerta del campo». Melilla ha contado y cuenta con grandes estudiosos y enamorados de sus recintos defensivos, por lo que sigue extrañando  la ausencia cualquier noticia sobre este hallazgo, o de qué va a ocurrir con él en el futuro. ¿Será necesario un modificado del proyecto del Centro Tecnológico?, ¿ cómo y qué muros van a ser conservados?. Como no hay noticias oficiales, hemos recurrido como siempre a las fuentes oficiosas, que nos han informado de que el muro hallado podría corresponderse con «el camino cubierto del Fuerte de San Miguel». Estaríamos ante uno de los restos más antiguos de las primitivas construcciones españolas, y que situarían la datación del muro en el siglo XVII. Es de suponer que cuanto más terreno se remueva, podrán ser encontrados más restos.

             Hemos recurrido a viejas fotografías y a la maqueta del Museo Arqueológico de Melilla, para localizar el antiguo fuerte de San Miguel y lo que pudiera ser el resto físico, de su legendario «camino cubierto», del que hablan algunas fuentes y algunas revistas de la Asociación de Estudios Melillenses. De momento, pese a su importancia, nadie se atreve a confirmar nada ni a avanzar suposición alguna.

         Nota: https://elalminardemelilla.com/2012/04/11/hallazgo-en-el-fuerte-de-san-miguel/

           Summary in english   

                The ancient covered way of San Miguel

      Melilla´s Govermnet  is building a Technological Center in an ancient zone of the city, in the old castle of San Miguel. The ancient castle was building in the sixteenth Century. This castle was the border between the spanish city and the moroccan field up to the 19th century. In this zone there were vegetable gardens and also there were many battles between spanish soldiers and ancients morocains warriors for four centuries. On having initiated the excavations for the foundation of the new building, it has appeared this rest of wall, of the forgotten covered way of San Miguel. It has been a surprise because they all were thinking that the old castle was dessapeared completely.

        Note: http://www.syler.com/SiegeWarfare/outside/glacis.html