El trabajo y la necesidad de podar


           La mayor parte del tiempo, El Alminar navega tranquilo, atravesando tempestades, épocas de calma, mares procelosos o pacíficos lagos. Estamos en donde nuestro trabajo, los colaboradores, y los lectores nos han colocado. Nos hemos erguido como una atalaya, como prefieren llamarle algunos, o como un alminar, como prefiero llamarle yo, y que es el nombre del elemento arquitectónico escogido para el blog. Aun así, cada cual puede llamarlo como desee.

        Cuento esto, porque en los últimos días se han recrudecido las acusaciones por «podar demasiado», o por no publicar determinados comentarios, o por no permitir determinadas expresiones. Cuando la situación social y política se complica, es una tentación fácil caer en la simplificación de la realidad, y alinearse con posiciones extremas. Mantener la independencia y un criterio equilibrado en situaciones difíciles, suele provocar la ira de tirios y de troyanos. Léase del Poder y sus acólitos y de sus enemigos y detractores. Todos al unísono, arremeten contra el que permanece sin inclinarse en medio de la ventisca.

         Hay un comentarista al que no hemos publicado dos comentarios, Pelayo, y le hemos explicado el porqué. Hay otro que está en lista de espera y cuyo Nick ya es malicioso. Hemos «podado» algunos comentarios porque contenían frases que incitaban al choque entre comentaristas. No es un trabajo fácil, pero cuando se llega a esta altura de visibilidad, hay que vigilar cada detalle. Cada vez hay más problemas legales con expresiones en redes sociales y en blogs, porque la gente piensa que no son medios de comunicación.

           Todo se lee, todo es público, y todo puede tener consecuencias. ¿Preferirían que El Alminar no existiese?. Sin duda. Ocurre que quien intenta ofender lo hace amparado en el anonimato, y desde aquí escribimos a cara descubierta. La vigilancia debe ser permanente. La sombra siempre acecha.

             San Bernardo y la necesidad de podar

            «Creedme: Lo que se ha podado retoña; lo ahuyentado vuelve, lo extinguido se enciende; lo adormecido despierta otra vez. Poco es , pues, podar una sola vez; es necesario podar muchas veces, continuamente, si es posible; porque, si bien te examinas, siempre hallarás alguna cosa que podar».

39 comentarios en “El trabajo y la necesidad de podar

  1. Es evidente y como suele ocurrir bajo toda censura o como quieran llamarlo, impera el miedo al debate sobre valores y derechos. Yo soy demasiado partidario de la democracia dialógica y en contra del bloqueo de la comunicación. Toda poda es peligrosa.

    Un saludo.

  2. No hay ningún miedo al debate. Si consigues mantenerte en unos parámetros aceptables, en donde no se hagan afirmaciones genéricas de descalificación, o no se sostengan afirmaciones como: «es imposible la convivencia con…», determinado grupo social, étnico o religioso, no tendré problemas en admitir los comentarios.
    En cuanto rebasen esa línea, no me quedará más opción que «la poda».

  3. Entendido y aceptado, aunque, mira, ya me gustaría poner a parir a más de uno -y no me refiero a los blogueros.
    Aprovecho para reconocer y darte las gracias de que hayas forjado y lleves al día El Alminar, donde muchos somos los que podemos opinar y otros muchos ojear. El trabajo que ello supone es sin duda arduo. Lo sé porque me ofrecieron hacer uno propio y al ver en que consistía y las horas que me iba a llevar, he rehusado.
    Si alguna crítica puedo hacerte es que eres ‘un fuguilla’: enseguida saltas con otra entrada y no da tiempo a participar. Sugiero cierta mesura y algo de ‘poda’ a tu veloz inventiva.

  4. Gracias José Luis. El dinamismo del Alminar responde al constante movimiento de las cosas. Melilla es a veces una máquina centrifugadora. Intento mantenerme en una entrada diaria. Ocurre que, a veces, la actualidad demanda un rápido cambio de escena.

  5. Muy bonitas fotografías. Dos de las iglesias de mas belleza de la ciudad de Mslaga. Antiguas, época de los Reyes Católicos. Ambas en el centro histórico. Significativas. Impresionantes y en cierto modo parecidas.

  6. Gracias Cruz de Malta. Esos que mencionas, son parte de los motivos por los que he escogido esas fotografías. Además, son dos campanarios espléndidos, y en las angosturas de las calles en las que están encuadrados, resultan más esbeltos e impresionantes.

  7. No me escandalizo por nada. Te recuerdo que «la convivencia» entre culturas, etnias y religiones distintas, es un valor consagrado por La Constitución y por la Carta de Derechos Humanos. Puede haber quien no esté de acuerdo con eso, pero el marco constitucional impera sobre esas opiniones divergentes.
    Dicho esto, conocida y expresada tu opinión, te diré que no admitiré más comentarios en esa línea. Podrás intentar divulgar tus puntos de vista en donde consideres adecuado, pero no en El Alminar.
    Hoy por hoy, la convivencia no puede ser puesta en cuestión en Melilla. He admitido tu comentario, para que quede constancia de que existe ese fondo social en nuestras ciudad, que algunos se empeñan en negar, o en abrirle las puertas con sus errores.

  8. Intento preservar unos valores que mantienen la convivencia entre culturas, para casi 80.000 personas en Melilla. El blog del Alminar es mi espacio. No le falto al respeto a nadie si decido publicar o no un comentario. Llegar hasta aquí y leer, es un acto voluntario. Nadie te obliga a ello y puedes perfectamente no hacerlo.

  9. Muy bien explicado Enrique, lo que más me gusta de esta nuestra Ciudad es la diversidad de culturas, me muevo entre musulmanes y jamás, jamás me han faltado al respeto, me siento agusto con ellos, me tratan con mucho cariño.Lo único que os diferencia es la fe que cada uno procesais, lo digo por que me considero atea total.En fin respetemos y seremos respetados.

  10. Por qué no salió la Mesa Interconfesional cuando tiraron un bote de pintura a la puerta de un comercio judio. Y además quién ha dicho que esa «Mesa» se reúna en las instalaciones de la Iglesia del Sagrado Corazón, cuando todo el mundo sabe que los judíos no pueden acceder a ninguna iglesia católica. En Melilla existen locales donde lo mismo se puede bailar, charlar y hasta comerse un bocadillo de anchoas, o de calamares, personas mezcladas de todas las religiones. y ¡viva el Papapaco!.

  11. Veo que el tema ha “finiquitado” una vez cumplida la misión que te habías impuesto y que aplaudo. Compruebo también que Laura ha expresado en su mensaje lo que seria justo en el comportamiento de los ciudadanos melillenses para que Melilla sea el ejemplo a copiar por otros lugares en los cuales nunca se había conocido la singularidad de nuestra ciudad. Pero como bien señalas, Hospitalario, este mismo tema deja constancia de que existe “ese fondo social”, que a quien daña en realidad no es al arrumi ni al moro ni al judío, sino a la ciudad en la que viven unos y otros. Es al conjunto de los ciudadanos que pueblan Melilla, o sea, la ciudad entera. Y es lamentable que comentarios indebidos sean causa de incordio entre unos y otros.
    Por lo dicho, no me queda mas que aplaudir la decisión de podar todo aquello que sea un perjuicio para la buena armonía de unos con otros! Pienso que cada uno tenemos el derecho de pensar y decir lo que sintamos, pero los que rigen el Blog, o los que lo rigen, están en su derecho de negar la publicación de ideas o expresiones que perjudiquen la seriedad de este ultimo!
    ¡Y perdón!

  12. Los hindúes siempre han contado, y forman parte del conjunto de la población melillense, y para mas inri, tenían mucha mas importancia durante tiempos anteriores. La diferencias entre los mencionados y estos es que jamas hubo problemas con ellos, y no pienso que los haya actualmente.
    Y por lo visto, la “Mesa interconfecional” también lo tiene en cuenta, no?

    Dejemosles tranquilos!!! ¡ Que siempre fueron muy apreciados!

  13. Mire Usted Angel: No intente darme lecciones de nada. Llevo 50 años en Melilla y hasta el Himno de Melilla los ignora. El Presidente de la Ciudad ha hablado de cristianos, musulmanes y judios y se ha olvidado de los hindúes. ¡Le pidorespeto! José Luis Blasco López, Defensor del Patrimonio de Melilla, ex presidente de la Asociación de Estudios Melillenses durante doce años , etc. No piense Ud., Don Angel, que soy un mindungui.

  14. HOSPITALARIO, le ruego no me pode nada de este escrito que de ningún modo es ofensivo. De cierta manera el que me ha dirigido a mi se puede pensar que lo es, aunque personalmente no me hace ninguna “mella”. Gracias.
    ——

    Señor Imparcial, de ninguna manera he pretendido darle lecciones de nada, ni a usted ni a nadie, ni por que posea un currículo como el que expone, ni siquiera porque fuese el l mas humilde de los mortales!
    Si usted quiere tomarlo así, no puedo hacer nada, y es solamente su problema.
    A continuación de mi mensaje en el que menciono las tres comunidades principales de la ciudad, usted envía el siguiente mensaje :

    “Por favor, no nos olvidemos de nuestros hermanos hindúes.”
    .
    Ante este mensaje, la lógica pura – a pesar de mis 87 años – es que usted hace referencia a mi mensaje, al cual respondí explicando, en cierto modo, el motivo por el cual no hice mención de dicha comunidad. ¿Y porqué no iba a hacerlo?
    Yo no puedo adivinar que usted tenia ese resabio guardado, y que lo haya soltado al leer mi mensaje. ¡Pero, bueno, cada cual tiene su temperamento, el mio es calmo, reposado, tranquilo y reflexivo, y no me alteran las simples cosas, y quizás es por esas cosas simples que me conservo en buen estado a pesar de mis años, y no pienso cambiar!

    Saludos

    • Se ha planteado alguna vez, Sr. Angel, qué ocurrirá cuando nosotros no tengamos un status dominante? No podemos negar el debate de que lo cristiano se está diluyendo al ritmo de la emigración (raíces magrebíes) de este pueblo. No ocurre lo mismo con los hindúes o con los judíos. Entiendo que es un tema complejo, y de mucha actualidad, que conduce, a mi modo de ver, si no hacia la marroquinidad de la ciudad, sí hacia su islamización.

      Un saludo.

    • Gracias, Don Ángel. Le he contestado en el mismo tono que lo hace Ud. y con respeto. No guardo ningún resabio hacia nada, ni hacia nadie. Lo del currículo no me afecta para nada, podría haber añadido algo más. Sólo para que Ud. comprendiera que no es la primera vez que he reclamado en favor de todas las comunidades sin exclusiones; mi minoritorias, ni mayoritarias.Y mi respeto hacia Ud. y hacia su edad.

      • Francamente, señor Imparcial, nada tiene importancia, pero lo de “resabio”, creo que lo escribí con justeza, y usted lo confirmó en su segundo mensaje. ¡Que usted quiera decir que no, pues muy bien, pero ahí están sus dos escritos y los dos míos! ¿Que el “resabio” provenía a causa del Señor Presidente y no fue a causa mía ? , pues muy bien, pero en ese caso, señor Imparcial, podía haber dirigido su mensaje directamente al causante y no el escribir “su queja” directamente después de mi escrito y se hubiera evitado mi respuesta y, francamente, su posterior poco agradable respuesta!

        Demos por terminado estos “baches” y piense que con este mensaje solo he deseado explicar poniendo en claro mi punto de vista.

        Saludos

        • Don Ángel, Ud. perdone. No tengo ningún «resabio» contra nadie, y mucho menos contra el Sr. Presidente. Él no era Presidente de la Ciudad cuando se aprobó el Himno de la Ciudad de Melilla. Como siempre he dicho las cosas a la cara, le comento que en su día me dirigí por escrito a la persona que ocupaba el cargo, y sin enfadarse, siguió siendo atento y educado conmigo. Y tenga Ud. en cuenta que no tengo que decirle nada al actual Presidente. En todo caso, soy libre de ponerme en contacto con él, o con alguno de sus mas cercanos allegados. Nos respetamos y apreciamos, salvo que Ud. demuestre lo contrario.

  15. No te preocupes Angel. El tema de «la poda» apunta en otra dirección.
    Los ánimos están encrespados en Melilla, de ahí alguna de las respuestas que se están leyendo últimamente. Creo que lo tuyo con Imparcial, es un simple malentendido.

  16. No se si usted es melillense o peninsular, aunque para el caso es lo mismo, estimado “Caballero”, por mi parte si lo soy desde aquel año de 1925. Dice que, refiriéndose a Melilla, que el problema es muy complejo. Nadie puede negarlo, pero hay que pensar que siempre lo fue, incluso desde el primer día que nuestros antepasados pusieron sus pies en lo que mas tarde se llamó Melilla la Vieja, aquel pedazo de roca que habían intercambiado por otro pedazo de tierra peninsular. Y ahí esta la historia que lo corrobora, y que todos los nacidos ahí lo mamaron arrullados desde la cuna por aquellas canciones guerreras de lo que acontecía en la ciudad o relacionada con ella,
    Una de ellas que mi madre me cantaba para dormirme -que idea- era aquella que, después de relatar la pérdida de Cuba, Filipinas y otras colonias, decía textualmente :

    “Y Melilla tu única hija
    la va persiguiendo el mismo camino.
    Si llegaras a perderla,
    tu desgracia lloraremos,
    y tu gloriosa bandera
    de negro luto la teñiremos.

    Si llegaras a perderla,
    tu desgracia lloraremos,
    y tu gloriosa bandera
    de negro luto la teñiremos.
    Y tu gloriosa bandera
    de negro luto la teñiremos.”

    Y mire, señor “Caballero”, aquí seguimos, con problemas como siempre lo ha sido, pero dígame , ¿en donde no hay problemas? ¡Y fíjese, que ahora cuando recuerdo estas cosillas, me viene a la idea que si la bandera se tiñera de negro quizás serian por otras cosillas!
    Espero que no!
    Saludos

  17. El buen jardinero debe también podar.
    Hay una parte de la familia Leret que guarda íntegro su rencor contra Carlota y sus hijas. Han tenido la ocasión de expresar sus opiniones, o de demostrar aquello que dicen, pero siempre lo han demorado todo hasta la aparición de cierta documentación que buscan, y que creen encontrar algún día.
    Se amparan en una parte del partido socialista e incluso de sus juventudes (JSE), y en un intento burdo de dialéctica pseudoizquierdista. Sin embargo, no prueban nada de lo que dicen y lo único que manifiestan es rencor y odio hacia las únicas y legítimas hijas de Virgilio Leret. Eso es lo único que han podido probar y dejar claro a todos.
    En El Alminar se les ha mostrado una tolerancia 70 veces 7 superior, a la que ellos permitirían en cualquiera de sus blogs, a quien les acusase de una manera tan visceral y violenta. Cualquiera de sus blogs, son 10 veces menos leídos que El Alminar. Por eso quieren expresarse aquí y no en los lugares, cuyos dominios han comprado, y que han decidido que sean los portavoces y la expresión de esa parte de la familia.
    Tienen derecho a contar su propia historia, pero en el lugar del que son propietarios. En El Alminar ya les hemos tolerado bastante.

  18. Volveremos al inicio la veces que sea necesario. No quiero en El Alminar guerras ajenas. Ya lo he explicado en otras ocasiones, no quiero que algunos utilicen este blog, como catapulta para lanzar piedras a otros lugares y a otros. Este es el motivo para no publicar un comentario de Timoteo, al que ya he dicho que no quiero que traiga aquí sus guerras. ¡Quien quiera entender que entienda!.
    Hoy mismo leo en las versiones digitales de la prensa de Melilla, que se pide la dimisión de un alto cargo del gobierno de Melilla, por llamar «supuestamente» orangután a una ministra italiana. Casi la misma expresión que tuve que podar en días pasados, a un comentarista y amigo, que decidió abandonar este foro.
    Creo que los criterios de moderación y poda están en el camino correcto, y aun así, la poda es mínima.

  19. Yo, que soy una seguidora de este blog casi desde sus comienzos, y que discrepo con su moderador en alguna ocasión, entiendo la acción de «podar». Es más, yo he sido podada también. (Nada significativo, que merezca la pena recordar, anecdótico tal vez). Lo peor es que esos comentarios, la mayoría de los casos, lo único que genera es confrontación y disensión de pareceres, y no construyen en absoluto, al contrario acaban en trifulca. Eso no quita que yo no opine igual que los demás en muchas ocasiones, y lo siga haciendo, pero de ahí a otra cosa…
    Aprovecho para desear descanso y feliz descanso estival a todos.

    • Una cosa es exponer posiciones diferentes, algo imprescindible para alcanzar acuerdos, y otra insultar y amenazar, que también se ha hecho aquí. Y eso es muy peligroso. Màs que piedras, diría expandir ideas venenosas.
      A la ministra italiana Cecile Kyenge, no solo le llaman en Italia «orangutàn», le arrojan plàtanos a la cara y la concejala y miembro de la Liga Norte Dolores Valandro, ha escrito en Facebook sugiriendo y/o pidiendo que la violen. Puede que esto esté penado con la cärcel.
      Como dicen hoy en otros foros, en un país,Italia, que es la cuna del Fascismo.
      Dicho esto, tengo que aclarar que en modo alguno trato de enlazar algo tan serio con las expresiones de todos los comentaristas podados. Desde mi percepción, creo que alguna no lo merece, incluso sin conocerla. Y aún a riesgo de pecar de entrometida.

  20. Es sintomático el envalentonamiento social contra las mujeres políticas y públicas. En España se ha perseguido por las calles a mujeres con cargos de representación pública, y se las ha insultado. sin embargo a Luis Bárcenas se le dejaba andar tranquilo por la calle y nadie se atrevía a arrojarle nada, no porque haya que hacerlo, sino porque era un hombre, y ademas fuerte.
    Siempre se es mucho más agresivo e implacable en contra de las mujeres. Es un mal endémico.

  21. Siempre ha sido así, lo es actualmente, y si no se pone remedio, lo seguirá siendo, en tanto sigamos creyendo que lo que para el hombre es un galardón, resulta que para la mujer es un baldón!

  22. Música para el veranito.
    Nass La Garriga – Dusminguet:: Catalanes, emigrados españoles, marroquíes y latinos.

    «Esto es un festín, un banquete para deleitar sus platos en forma de tagines, cuscús, comino, aceitunas, quefta o azafrán. Y un sinfín de ritmos rítmicos que saben a especias y que dan un toque exótico a estos sonidos que adquieren color y se hilvanan entre sí. Se hilvanan entre sí con la lana de las ovejas que está en las alfombras, y que se pueden entretejer usando cualquier objeto que produzca ritmo, sonido o cualquier cosa que invite al baile.»

    «Bon profit gent, bon profit amb aquesta mescla ben barrejada que ha sigut possible gracies a tots els elements que aixó sigui presentable.»

    «Bienvenus, nous vous invitons a travers les montagnes de Chaouen, le bleu de cette ville qui explose pour suivre les ondes de cette musique mistique. Bienvenus¡¡¡

  23. Melilla se ve mejor cuando se está fuera de ellla. Se ve todo de lo que carecemos, que es mucho, y se ve lo que tenemos, que no es tanto. Hay una falsa sensación de realidad en nuestra ciudad. La propaganda lo anega todo.

  24. Enrique permite que te diga que hasta ahora te tengo por un compañero correcto, educado, cordial e inteligente y con respecto a lo de aceptar o no… te rogaría que fueras » igual de tolerante con todos» porque si no se te verá el plumero y no tendrás autoridad para aceptar o prohibir nada a nadie y menos a comentaristas como José Luis Navarro, y muchos más.

    ¿Cuál es el limite de la libertad de expresión? Al menos dí la frontera que nunca hay que sobrepasar en el Alminardemelilla. Hasta ahora, que yo sepa, nadie te ha insultado.

  25. La tolerancia es máxima, Francis. No están permitidas las trifulcas personales, ni las descalificaciones. Te puede asegurar que en comentarios que nadie ha visto, los insultos hacia mí, han estado por encima de cualquier límite.

  26. Hubo demasiado enconamiento en un momento determinado y se decidió preservar el blog. No obligamos a nadie a entrar aquí. La norma, desde entonces es: Inconmovible rigor. Si tenemos que volver a podar, lo haremos, sin contemplación alguna.

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