A primera vista parece una cómoda salita de estar callejera. En una mañana soleada, sin demasiado calor, no sería mala idea disfrutar en la calle, sentados en un cómodo sillón orejero, de los de toda la vida. En la sociedad del consumo, es difícil deshacerse de muebles y trastos viejos. En realidad, en nuestra ciudad se confía en el reciclado urbano, al margen de los contenedores y programas oficiales de separación de basuras. No hay nada que no puede ser reutilizado en Marruecos. Sin la labor diaria de los rebuscadores de basura, y sin la gente que se dedica a hacerse cargo de lo que ya no nos sirve, nuestras autoridades no serían capaces de hacerse cargo de todas las cosas que desechamos. Una ciudad así sería más hogareña.
Mes: octubre 2015
El Campanario de La Concepción
- Campanario Iglesia de La Purísima
- Campana Concepción, interior
- Campana Victoria, interior e inscripciones
Campanas y badajos en la Iglesia mayor de Melilla
La Iglesia de La Purísima es la iglesia mayor de Melilla. No todo se sabe acerca de ella, aunque se ha escrito y contado mucho. En su entrada hay un folleto al que habría que añadir algo de información, al menos la relativa a las campanas y hacer más precisos algunos datos.. Tiene tres sobre su campanario en forma de espadaña. Hace un mes elaboramos una entrada acerca de ellas y José Luis Blasco, nos proporcionó una información que precisa, que completaba la historia. Ha sido necesario volver al campanario, realizar nuevas fotografías y obtener nuevos datos. Nunca podemos pretender escribir la última palabra sobre algo, pues siempre habrá un dato más que añadir o un detalle más que descubrir.
Las campanas Victoria y Concepción
En el balcón del campanario de la iglesia de Melilla la Vieja hay dos grandes campanas, una mayor y otra menor. Se llama lado del evangelio a la parte derecha de la nave mirando desde el altar, y lado de la epístola, a la parte izquierda. Según este modo de identificación, la más grande de las campanas, la fabricada en 1719 en Málaga, se denominaría como Concepción, por ser la titularidad de la iglesia, y Victoria en honor a la patrona de Melilla. Son una denominaciones populares o basadas en la tradición, porque las campanas no llevan nombre alguno.
Es interesante hacer notar que hay una campana anterior al asedio de 1745, y otra posterior. También una es anterior a la proclamación de la Virgen de La Victoria como patrona de la ciudad en 1756, y otra posterior. El asedio de 1745 y su levantamiento el día de San José, y la proclamación de la patrona, son los dos hechos más importantes que dividen la historia política y religiosa de la Melilla antigua. Todavía hay mucho sin saber, como la procedencia de la imagen patronal, que ya empieza a ser claro que no vino en las naves de Pedro de Estopiñán.
En el interior de las campanas
Ambas campanas han perdido los yugos de sujeción. Bombazos, terremotos y derrumbes descompusieron la imagen original de la fachada de la iglesia. En la actualidad están fijada por tres vigas de acero que atraviesan sus asas. El interior muestra inscripciones, como la de Nuria en 1922. La sujeción del badajo al interior de la campana se realiza mediante una argolla y un gancho, como es el caso de la campana mayor y más antigua, la más pesada también. La campana menor, casi un siglo posterior a su compañera, está reforzada por una atadura elaborada con «una verga de toro», según la sensacional revelación efectuada por el historiador religioso José Luis Blasco. Parece campanas gemelas pero no lo son. Parece una historia completa, pero tampoco. Siempre habrá algo más. que decir o que mostrar. Falta un pequeño párrafo alusivo a las campanas en el folleto sobre esta iglesia.
Barruntos de agua en octubre
- Nubes altas sobre el Gurugú
- La señal del calor
- Cofradía de la lluvia
El fin del tiempo seco
Los cielos barruntan agua, pero luego lo que parece anunciarse se disipa. Hace apenas unos días vimos una sombra de agua en unas nubes al atardecer, que dibujaban un pequeño arco iris. Pero como dice el refrán: «el agua del arco no llena el charco». Melilla está muy seca. Esa pequeña señal del arco iris al atardecer, indica la continuidad del calor. En las iglesias ya se lanzan rogativas para la lluvia, y en el mundo rifeño, antaño, se veían por la ciudad a los danzantes de la lluvia, que con chirimías recorrían los campos y las calles de Melilla, lanzando también rogativas, cánticos y solicitando limosnas.
Esto se asentaba en antiguas tradiciones preislámicas. Octubre es mes de siembra, por lo que lluvia es muy necesaria, sobre todo en el seco norte de Marruecos. La Tagonja es una especie de muñeca, que representaba a la esposa de la lluvia . Se cogía una pala o tridente utilizado para aventar el grano y se le vestía con ropas de mujer. La cofradía de la lluvia recorría los aduares tocando música y solicitando limosnas. Luego, se celebraba una pequeña fiesta en los márgenes del arroyo, a la que acudía el pueblo y se celebraba un pequeño banquete. La Tagonja era rociada con agua y finalmente quemada, en la esperanza de que al final, la propia agua de la lluvia apagase. De todos los ritos utilizados para implorar la lluvia, éste es el más extendido. También se ofrecían sacrificios rituales de animales, bien de modo específico o dentro de la propia fiesta. Las mujeres son las encargadas de vestir y crear a La Tagonja.
Hay un indicador de sequía en la ciudad y su entorno, y es la lagunilla de Mari-Guari. Hace años era usual verla casi siempre con una pequeña cantidad de agua, salvo en los meses de verano, lo que hacía constante la presencia de las aves. Lo usual es ahora verla casi completamente seca, a lo largo de todo el año.
No hay lluvia y el agua es necesaria. Renueva el ambiente, moja el suelo y hace crecer lo sembrado. El olor de la tierra húmeda y de la vegetación es muy intenso y gratificante. La renovación ritual mediante el agua.
Un millón de visitas
Inmersos en la sequía, en la incertidumbre del tiempo presente, en la impredecibilidad del futuro, hoy diez de octubre, en el quinto año desde la creación de Alminar, hemos alcanzado el millón de visitas. Era una cifra impensable en aquel 4 de mayo de 2011. Lo señalamos solo como un dato estadístico.
El accidente de cada día
- Colisión, calle Jiménez e Iglesias
- Acceso al Real, calle Luis de Ostariz
- Saturación y accidentes
Melilla tiene 81.000 habitantes censados en doce kilómetros cuadrados. Su vías urbanas son las que son y no son susceptibles de ampliación . El informe del Plan General de Ordenación Urbana, insiste, barrio a barrio en la carencia de vías lo suficientemente amplias como para permitir un tránsito ordenado, y la falta de aparcamiento en cualquier área de la ciudad. Los vehículos no se pueden tirar al río, ni la gente deshacerse de ellos, o dejar de usarlos porque a algún grupo ciudadano así lo considere.
Dificultar la circulación de vehículos, con obras permanentes y sin planificación, o eliminado el tránsito rodado en vías principales, solo lleva a la saturación de las adyacentes. Es exportar el problema algunos metros más allá, en ningún caso resolverlo. Melilla necesita una planificación integral del tráfico, y aparcamientos suficientes en los barrios. No existe ninguna de las dos cosas. Las obras del bulevar del Real han resultado un fracaso y un derroche de dinero sin paliativo ninguno.
El barrio del Real es uno de los más populosos de la ciudad, con 13.000 habitantes y una exigua cantidad de aparcamientos en las vías públicas, que se han visto mermada de modo considerable con la obra de la calle de La Legión, que se ha vuelto intransitable. Una ciudad mal planificada, no puede tener un desarrollo ordenado y camina hacia el estrangulamiento.
El barrio del Real está estrangulado tanto en el acceso como en la salida del mismo, que solo puede realizarse por las calles Aragón, Gurugú y General Astilleros. Al retirarse el tráfico de la ya intransitable calle de La Legión, el objetivo que satisface a algunos; se han saturado las colindantes, como es la calle de Jiménez e Iglesias. Entrar o salir del barrio en las horas punta es una situación infernal, que cuesta un mínimo de 10 a 15 minutos.
La remodelación del bulevar del Real ha supuesto, entre otras cosas, que el autobús urbano ya no puede transitar por allí. Ahora realiza las paradas en la calle de Jiménez e Iglesias, y al detenerse, provoca retenciones del tráfico. No se ve a ningún ciclista transitando por la recién peatonalizada calle central.
Estas obras o ensayos, no se pueden llevar a cabo si no existen alternativas, al tráfico rodado, a los aparcamientos eliminados, y a aquello que se ofrece como solución, el transporte urbano. Han conseguido empeorar las tres categorías, y aumentar la peligrosidad para peatones y conductores, que pagan los mismos impuestos. Los pasos de peatones de la calle Jiménez e Iglesias, son absolutamente vergonzosos.
Voces de Chernobil
- Voces de Chernobil
- Medalla Liquidadores de Chernobil
- Edificios de Pripyat
El premio Nobel de Svetlana Alexievich
Tenemos la primera edición del único libro publicado en España de Svetlana Alexievich. Llegó a las librerías españolas 20 años después de la explosión por sabotaje, del reactor 4 de Chernobil, junto a la ciudad de Pripyat. Calculo que no se debieron vender mas de 1000 ejemplares en todo el país. Ahora, en medio de la época de las trilogías basura, se le concede el Premio Nobel a la autora de uno de los libros más profundos que haya podido leer hasta la fecha. Intentan venderlo como «la crónica del fracaso de la Unión Soviética», como si su modelo opuesto, el mundo occidental y capitalista no tuviese sus raíces metidas en la podredumbre más profunda y en el fracaso más clamoroso.
Es una narración exquisita de personas sin rostro, de los héroes anónimos de Chernobil, los denominados como «los liquidadores», el grupo humano que demostró la mayor valentía posible. Se enfrentaron a la muerte radiactiva sin una sola duda o vacilación. Son las voces y testimonios de cientos de personas que 30 años después de la catástrofe, ya hayan desaparecido. El relato tiene páginas, párrafos, de una belleza plena. El capítulo dedicados a «los liquidadores» es sublime. No se puede ser más valiente, y si hay una definición de héroe, esa es la de ese grupo de personas, que inmolaron sus vidas para cubrir un reactor nuclear ardiendo.
Resaltaré dos párrafos, dos escenas, dos momentos excelsos del libro «Voces de Chernobil». La primera es una reflexión sobre el propio hecho de la escritura, de la necesidad de dar testimonio en un mundo en el que a casi nadie le importa nada. La segunda escena es una descripción de la propia explosión, de la noche incendiada de Chernobil, vista desde la ciudad de Pripyat. Hace apenas unos pocos días comparábamos unas imágenes del antiguo y abandonado hospital militar de Melilla, con la ciudad dormitorio de la central nuclear.
Monólogo acerca de para qué recuerda la gente
«Todo continuará igual, seguiré como antes riñendo al cochero, me pondré a refunfuñar como siempre. Entonces, ¿para qué recuerda la gente. ¿Para establecer la verdad?. ¿La justicia?. ¿Para liberarse y olvidar?. ¿O porque comprenden que han participado en un acontecimiento grandioso?. Y todo eso a sabiendas de que los recuerdos son algo frágil, efímero; no se trata de conocimientos precisos, sino de conjeturas sobre uno mismo. No son aún conocimientos, son solo sentimientos«.
Monólogo acerca de lo que no sabíamos: que la muerte puede ser tan bella
«He olvidado decir que vivíamos en Pripyat, junto al reactor. Hasta hoy tengo delante de mis ojos la imagen: un fulgor de un color frambuesa brillante; el reactor parecía iluminarse desde dentro.. No era un incendio como los demás, sino como una luz fulgurante. Era hermoso. Si olvidamos el resto, era muy hermoso. No había visto nada parecido en el cine, ni comparable.. Al anochecer, la gente se asomaba en masa a los balcones. Vivíamos en un noveno piso, era una vista espléndida. En línea recta había unos tres kilómetros. La gente sacaba a los niños, los levantaba en brazos. ¡Mira! ¿Recuerda esto!. Y fíjese que eran personas que trabajaban en el reactor. Ingenieros, obreros. Hasta había profesores de física. Envueltos en aquel polvo negro. Charlando. Respirando. Disfrutando del espectáculo».
Nota:http://englishrussia.com/2015/02/10/the-looters-of-chernobyl/
https://valistarworld.wordpress.com/tag/liquidadores-de-chernobyl/
Teoría de la relatividad
- Carretera Vía Láctea
- Plaza de Los Pinares
- Coche, callejón del Universo
Un mundo hostil
Me han robado el móvil a las 17h 30 minutos de la tarde, en acto de servicio, mientras buscaba una dirección para mi trabajo. Todo esto ha sucedido en la Carretera de la Vía Láctea, junto al callejón del Universo. Parece «2001 Odisea en el Espacio» , pero solo es 2015 en la Galaxia de Hidúm. Un poco más abajo de donde se ha producido el hecho se encuentran los callejones de Caronte (el barquero del infierno) y Pandora (la caja que al abrirse esparció los males por La Tierra). Quién puso algunos de esos nombres, acertó casi de pleno, con la situación social latente de éste barrio.
Hablo de estos barrios y estas calles porque transito mensualmente por ellos, como muchos otros trabajadores: carteros, repartidores, notificadores de La Administración. Lo hago desde hace muchos años, y nunca me había sucedido nada hasta ahora. El mundo se está volviendo hostil. En el Distrito 5º se concentra la mayor parte del desempleo de Melilla. Hay mucha gente, sobre todo joven, sin presente ni futuro. Son muchas horas sin nada que hacer, y eso es tener siempre abierta una puerta al mal. Los malos ejemplos son siempre mayores que los buenos, y sobre todo, más fáciles de imitar.
Dentro de la violencia del suceso, ha resultado la mínima posible. Traigo a colación a Albert Einstein, porque su Teoría de La Relatividad estableció una Ley Universal, como la del callejón. Einstein solo dijo que era relativa la percepción del tiempo según la posición del observador, pero dejó claro que existen tanto el tiempo como el espacio.
Del concepto de La relatividad se pasó al relativismo social, y esto es algo falso, porque el Bien y el Mal existen, así como las acciones que fomentan uno y otro. Si nada tiene premio ni castigo, entonces todo da igual y nada importa. Esta es la norma que impera. Ahí está el caso de Rodrigo Rato, de Miguel Blesa y de tantos y tantos otros. Los bandidos siguen libres y los jueces que intentaron castigar sus fechorías fueron apartados de sus funciones. El mensaje que se transmite a la sociedad es demoledor.
Lecciones de un robo
No confío en internet. Es un mundo en el que los hackers se mueven a sus anchas. No realizo ningún tipo de operaciones a través de ella. Los teléfonos móviles son los más vulnerables de todos. Además puede ocurrir que se pierdan, extravíen o sean robados, por lo que no se deben usar para otra cosa que no sea la que su nombre indica. Por ello recomiendo el borrado y vaciado constante de cualquier cosa almacenada en estos aparatos. A partir de ahora, lo que venía siendo una norma genérica lo convertiré en una ley personal. Si se extravía o lo roban, que sea solo un teléfono lo que se pierde.
Muchas veces he escrito que no se pueden abandonar áreas completas de las ciudades a su suerte, como es el caso de Reina Regente, de la urbanización Los Pinares, de La cañada de Hidúm. Caminar, moverse por estos espacio urbanos es muy inquietante. No hay vida en las calles, ni cafeterías, ni espacios comunes, no hay nadie sentado en los pocos bancos públicos. Todo se lleva a cabo dentro de las casas y a partir de una determinada hora las calles están vacías. Mientras que en otras partes de la ciudad una papelera caída, o una tulipa de farola rota, causa alarma social, por aquí, en la Vía Láctea, un coche puede permanecer en este estado durante un mes, sin que nadie siente la necesidad de llamar a los servicios municipales para que lo retiren.
Rotonda del desarrollo en el distrito 5º
- Isleta peligrosa, carretera de Hidúm
- Isleta Superior, carretera Vía Láctea
- Carretera, estado del pavimento
Se llama la rotonda del desarrollo, porque el mismo gobierno de Melilla la presentó así, dentro de Plan para el desarrollo de los distritos 4º y 5º. Es una rotonda peligrosa, entre otras cosas porque no tiene los preceptivos señalizadores reflectantes. Por la noche no se ve. Son especialmente peligrosas las isletas, que no están señalizadas. El pequeño triángulo de la carretera de Hidúm te lo comes aunque sea de día. Si no se conoce su ubicación, es muy probable que acabe bajo las ruedas del vehículo y provocando un susto. Algo más leve es el situado en la carretera de la Vía Láctea. Aun así, tampoco tiene los obligatorios reflectantes, que indiquen su presencia en la calzada.
Este tipo de actuaciones propagandísticas, solo las sufren los que viven en estos barrios y aquellos que deben transitar por estas calles por motivos laborales. Para el resto de la ciudad, exactamente el 50%, este lugar ni existe ni lo conocen. Por este motivo, algo tan deficiente y peligroso, no causa el mismo impacto mediático que una tapa de alcantarilla desaparecida en el centro de la ciudad.
El pavimento de la calzada, en el lado colindante con la pista de carros apenas existe, es un leve recuerdo. Los baches y el hundimiento de la tapa de alcantarilla hace difícilmente transitable la zona. Las rotondas costaron 64.000€ y en su momento dimos cuenta de su instalación. Pon aquí transitan vehículos, el transporte urbano que algunos parecen empeñados en dificultar. Pero nada de esto importa, porque sucede en «la otra Melilla».
Nota:https://elalminardemelilla.com/2014/10/26/en-la-galaxia-de-hidum/


















