


Mayo es el mes del Alminar, de sus conmemoraciones, aniversarios y recuerdos. Uno de ellos, el más importante, es el dedicado al aniversario del asesinato del juez Giovanni Falcone, un 23 de mayo de 1992, en la autovía de Palermo, en Sicilia. Cada año la actividad del Alminar se detiene para conmemorar su nombre y su servicio al Estado, en democracia, por supuesto.
En 2022 escribíamos esto, plenamente vigente: «La actividad ilícita, el campo gris en el que se mueve la mafia, está indisolublemente ligada a la corrupción, el gran mal que asola y azota al ejercicio de lo Público. Las pequeñas corrupciones acaban en las grandes, y el político o el servidor público que queda tocado por una dádiva, una prebenda, luego ya queda atado para siempre, ya no es independiente; es influenciable».
La ciudad de Melilla, nuestra ciudad, está abatida y expectante ante un presunto intento de asalto al sistema electoral, llevada a cabo por una trama que ahora se investiga, y que habría aprovechado un resquicio en la Ley Electoral, para introducir una cantidad masiva pero no determinada, de votos por correo, en las inminentes elecciones locales de 2023. Lo más importante en una Democracia es la libertad de voto, pero si esta se esclaviza o anula, aprovechando las dificultades económicas de una parte del electorado, o se le atemoriza mediante la difusión de falsedades, o se intenta agruparla bajo falaces doctrinas e identidades de todo tipo, se esta conculcando la propia esencia del Estado democrático, que es el voto en libertad y con conocimiento de causa. El escándalo y el susto han sido tan grandes, que ahora se pondrán en marcha las medidas legales necesarias para que esto no vuelva a ocurrir.
El legado de Falcone sigue ahí, y su vocación de servicio al Estado también. En el primer mes del año, Matteo Messina Denaro, uno de los jefes de la Cosa Nostra que ordenó su asesinato, y también el de su compañero y también juez Paolo Borsellino; tras pasar media vida en la clandestinidad. Ahora ya solo le espera la cadena perpetua, como a Salvatore Totó Rina, fallecido en la cárcel en 2017, en la que estaba recluido desde 1993, también a perpetuidad. La victoria del Estado ha sido en este caso completa, aunque ya hayan pasado 31 años desde los atentados que costaron la vida a los dos jueces antimafia.
En 2021 rescatábamos otras de las inolvidables frases de Falcone: «De nada sirven las leyes si no van acompañadas de una sólida voluntad política; y esta no nacerá mientras todo el país no sienta la necesidad de combatir el crimen organizado (corrupción). El marco y las estructuras existen, sobradamente; solo falta ponerlos en marcha con unos hombres profesionalmente competentes. Siempre que digo esto, mis interlocutores ponen los ojos en blanco, como si yo estuviera diciendo majaderías o blasfemando«.
Como cada año, además de dedicar todo el día a la memoria de los jueces Falcone y Borsellino, hay que ofrecer algo nuevo. Extraemos sus reflexiones del inagotable libro de conversaciones con Marcelle Padovani: «En mis momentos de melancolía me pregunto a veces (y sigue siendo vigente y actual): «¿Porqué unas personas que poseen cualidades intelectuales tan evidentes, se ven obligadas a inventarse una actividad criminal para poder sobrevivir? «Porque es más fácil», responderá más adelante.
Efectivamente, es más fácil rendirse que luchar, pero para hacer esto, para llevar a cabo esa lucha constante, hacen falta ejemplos. Con cada escándalo, con cada político o autoridad que cae, con cada caso de corrupción, o con cada partido que incumple sus promesas y se pasa al otro lado, al de la vieja política, al de las castas, aumentan el número de los descreídos en el Estado de Derecho, en la Democracia, que es lo único que nos salva y ampara a todos; y que es lo único que no puede ser puesto en discusión ni mermado.
Cada año también añadimos nuevos nombres de servidores del Estado caídos en su defensa. En 2023 incluimos el nombre de Carmen Tagle González, fiscal de la Audiencia Nacional asesinada por ETA el 12 de septiembre de 1989, de la que incomprensiblemente apenas existen fotografías ni biografías completas. Queda su nombre y poco más.