Las impresionantes cifras del vacío
A lo largo de los seis años de existencia del Alminar, hemos dado buena cuenta de la impresionante obra que supuso la construcción del parking de Isla de Talleres. Son 5 plantas excavadas bajo tierra, con 3200 plazas de aparcamiento, de las cuales 707 (muy extraña cifra), fueron compradas por la Ciudad de Melilla, por la cantidad de 13.750.000€, o sea a 19.500€ cada una. Eso quiere decir que además de las dos plantas que vemos, existen otras 3 más, con 2493 aparcamientos, que suponemos igual de vacías que las del aparcamiento público.
Uno de los grandes problemas de Melilla es que existe mucho dinero en circulación, tanto en la economía oficial, como el la oficiosa o atípica. El dinero lo distorsiona todo y crea contigüidades invisibles entre Poder y negocios.
La Ciudad Autónoma intentó crear el hábito de «pagar por aparcar», pero la realidad es que no hacían falta tantas plazas de aparcamientos de titularidad pública. La otra cuestión es que a las arcas municipales les da igual rentabilizar o no la inversión realizada, algo que no sucederá hasta pasado el año 2300, cuando ya nada de esto importe, y el destino de Melilla ya no esté en nuestras manos. El centro de la ciudad no tiene población y queda vacío pasadas las ocho de la tarde, por lo que ante cualquier acontecimiento público de gran magnitud, se encuentra suficiente sitio libre para aparcar. Nada de esto fue una previsión acertada.
Las fotografías están realizadas con ocasión del acontecimiento de La Carrera Africana, y si ante un evento así, las dos plantas de aparcamiento están así de vacías, entonces queda demostrado que no eran necesarias. Nunca habrá tanta gente en el centro de Melilla como en una ocasión como esa, salvo la Cabalgata de Reyes o la de Carnavales.
El otro problema es el acceso, complicado en la entrada, dada la dimensiones de los coches actuales y teniendo en cuenta el tipo de vehículo preferido en la ciudad: los mastodónticos 4×4. La salida es sencillamente infame. Eso sí, hay que agradecer que el árbol no esté situado en el centro del carril.
La obra, fue prácticamente financiada con la inversión público, sin embargo el mejor acceso a los aparcamientos, los de la parte privada, fue construido gracias a una cesión generosa de terreno público, para lo que hubo que desmontar el patio de la antigua Casa de Socorro. Son las incongruencias de ésta ciudad, en la que el dinero sobra, para ser derrochado.
El resto de las cifras magnas son estas: 29.000 m³ de hormigón; 20.000 m² de parking; 8800 metros lineales de muro pantalla (Trump debería tomar nota); 100.000 m³ de tierra evacuadas; 88.000 m³ de gua achicadas( el pantano de Las Adelfas); 3500 Tm. de hierro utilizado ( 1/2 Torre Eiffel). Y todo esto para el uso y el beneficio que se ve en las fotografías.
Nota:https://elalminardemelilla.com/2012/03/01/tocando-fondo-en-isla-de-talleres/
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Cada vez qe leo este articulo entiendo más necesaria nuestra participación en los temas de movilidad …
La mala planificación, el derroche, la mala gestión, no tienen que ver con el abandono o prohibición de los vehículos. En Melilla se entorpece la circulación, no se pone límites a los coches. He visto ciudades en donde conviven zonas peatonales y vehículos, sin problema alguno.
La vuelta a la diligencia no es posible, porque protestarían los animalistas, que gritan «asesinos» a los coches de caballos en Málaga o Sevilla.
¡No me digas que es por eso!
Una precisión. La foto que has puesto corresponde a la entrada al garage privado de la Urbanización Magna Melilla. La del Parking público está en la Avenida de la Democracia, con salida a Avenida de la Marina Española. Espero que no te moleste el comentario.
Perdón. No había leido el pie de foto. Ya veo que la precisión la habías hecho tu…. Lo siento.
Los comentarios son el modo de aclarar las cosas y de corregir errores, Corona 71. Tu eres uno de los comentaristas y colaboradores más antiguos del foro. Siempre te los agradezco. No me molestan los comentarios, sobre todo cuando se ciñen a los temas propuestos.
Solo se crispa el ambiente de cordialidad que impera en El Alminar, cuando se quiere hacer a Hospitalario. o sea, a mí, el objeto de ese debate, que no es tu caso.