Los pascueros de Navidad


              Hecho el gasto, tirado el trasto

   Vimos instalar los pascueros en las semanas previas a la Navidad y ahora vemos como se tiran y pasan al capítulo siguiente. No es que se los lleven a los viveros para intentar salvar algunos, o para adornar otras zonas de la ciudad, es que simplemente se tiran en su mayoría. Este es el modelo de gestión que está arruinando ciudades y dilapidando el dinero público, el de todos. El gasto navideño en pascueros no supone una cantidad nimia de euros, sino alguna de más consideración, y siempre para la misma floristería, o el mismo importador.  No hay control sobre el gasto público innecesario, ni tampoco ganas de contenerlo. Si ocurre algo anómalo o el Tribunal de Cuentas pide explicación por alguna cosa no conforme a ley, se achaca todo al «error administrativo» y santas pascuas.