Los niños/as son grandes y atrevidos exploradores. Son ellos los que han descubierto al presencia de dos nidos de avispas en la esquina del baluarte de San Fernando, justo al lado de la embocadura del túnel de Santa Ana. En el pasado verano y otoño, fueron varios los niños que resultaron picados por las avispas, que siempre buscan lugares cercanos al agua para establecer sus colmenas.
Las referencias hacen pensar en que son avispas amarillas, por lo general bastante más agresivas que las avispas papeleras. Las avispas amarilla suelen buscar oquedades en las paredes, y lugares cerrados para establecer sus colmenas. Pueden picar llegar a picar varias veces y también hacerlo en enjambre, se sientan atacadas o no.
Su presencia en un área llena de niños, y el pasado historial de picaduras, obligan a actuar de modo inmediato, y eliminar estos nidos, y buscar otros más, que pudieran estar establecidos en lugares menos visibles. Es una zona de gran tránsito.
No deja de ser paradójico, y casi una advertencia, que la nueva plaza de Melilla, la del siglo XXI, el de la convivencia y la modernidad, sea también, lugar de asentamiento de avispas. Hay que estar siempre vigilantes y nunca dar nada por seguro, ni por establecido. Para mantener todo, siempre hay que trabajar, dedicar esfuerzo y atención constantes.
Todo un avispero, y en la plaza de las culturas. Un gran símbolo.
Las avispas de Las Culturas. Hospitalario es único para la metáforas.
Gracias Isa. Son muchos años de oficio. Localizados los avisperos por casualidad, y a tenor de todo lo que está sucediendo, el título está escogido con toda la intención.
Ayer me hiciste reir con tu ingenio. Hoy he vuelto a releerlo, e incluso he acudido al dicccionario de la RAE para cerciorarme de la diferencia entre avispas y abejas.
Así como entre avispas amarillas y avispas papeleras. ¡Maravilla de Internet!
También se trata de eso, amigo y hermano Imparcial, de reírse. Tú sabes que en mis escritos, están calculadas hasta las comas. Quién nos conoce sabe que somos dos personas humildes y modestas, sin embargo, nuestro paso desata demasiada envidias, en ésta a veces, sucia tierra.
Cuidado con las avispas, que medran por ,Melilla. Dicen que una especie peligrosa » avispas envidiosas» campea por barrios,calles y plazas, Pero estimado Hospitalario, yo sé que ya estás curado de espanto y como buen previsor te has inyectado el antídoto. Saludos del nadorense que os aprecia y apoya.