Nunca se debe subestimar la capacidad de resistencia y ataque del enemigo, pero tampoco se deben fomentar declaraciones alarmistas, como las del Ministerio del Interior, que unas veces nos sitúan en zona de máxima alerta y otra no. El control debe ser eficaz y a la vez silencioso, casi invisible.
Esta tarde, a las 17h 00, la zona del parque Hernández colindante con la plaza de España se encontraba acordonada, y cortado el tráfico en la zona superior de la avenida de La Democracia. Dentro del parque había numerosos efectivos policiales, y una furgoneta de detección y desactivación de explosivos. Agentes del Cuerpo Nacional de Policía impedían el acceso y circulación tanto por la zona acordonada del parque, como por las aceras que lo bordean.
Al parecer alguien había dado el aviso de que una maleta de gran tamaño, había sido olvidada o dejada junto a una palmera, o entre los bancos del interior del parque. La operación ha sido rápida y solo se han enterado de ella las personas que acudían al trabajo, pues se trataba de la hora de apertura de los comercios, y de aquellos/as que acudían a realizar las compras del «black friday».
Lejos y ridícula queda ahora aquella frase del entonces presidente José Mª Aznar, de Tony Blair y de George Bush cuando tras derrocar con una invasión militar al Régimen de Saddam Hussein en Irak, afirmaron: El mundo es ahora un lugar más tranquilo. Ha ocurrido justamente lo contrario. La inseguridad es mundial y absoluta.