- Gallo
- Pavo Real
- Belén del Hornabeque
- ¿Ángel o gárgola?
Enero es el mes que abre el año, dedicado al dios Jano (el de los principios y fines), por los romanos y que siempre se representaba con dos caras, una amable y otra agria. Enero, el januarius romano, abre el año y la luz, por en este mes la luz solar aumenta en casi 46 minutos a lo largo del mes. Pese a su apariencia festiva, es un mes duro, tanto que muchos refranes aluden a este carácter: quién pasa enero para el año entero, y el de «siempre los labradores están llorando, unas veces por duro y otras por blando». La luz de enero siempre es engañosa.
Buscaba una imagen para reiniciar esta tarea, no un tema porque hay muchos pendientes. Buscaba el modo de arrancar y paseando por el Belén de Melilla, encontré la imagen de un orgulloso pavo real y el de un gallo peleón. Ambos posaron para El Alminar. Ninguno eludió nuestro objetivo. El orgullo es la perdición del poderoso y también de la de cualquiera. Fue el orgullo lo que llevó a Lucifer a la rebelión. Es por este motivo por el que de todas las actitudes del ser humano, la del orgullo es la que se considera como de inspiración luciferina.
El año es muy largo y todo acaba de empezar. Las calles del Belén del Hornabeque estaban vacías y el ángel se encontraba en una posición, en la que no se sabe si protege o está presto a echársele encima a alguien que se acerque al Belén de modo indebido. Este es el motivo por el todavía tanta gente se resiste a ver lo que está pasando. Intuyen o quizá ya ven que no nos están protegiendo, pero tienen temor, y eso ya se percibe en cualquier parte. Han mordido incluso a la Lotería Nacional. Ha habido fiesta pero no alegría.




Hemos vuelto para quedarnos.
«Ha habido fiesta pero no alegría.» Yo me tome las uvas y el cava sin ganas.
Yo escribo lo que percibo y veo. Yo siempre como las uvas con gusto, es una fruta que me resulta agradable, tanto por sí misma, como destilada. Un gran sabio árabe hispano, Omar Khayyam, de la época de Al Andalus decía: no tengo confianza más que en el vino…
Nada hay como una uvas dulces. Ya he puesto otra vez este vídeo. Escribiremos sobre uvas dulces
hospitalario me refiero que mientras bebía cava y comía uvas a mi me dolía que con tantas necesidades como cientos de miles de españoles bajo el umbral de la pobreza, cifras escandalosas de desempleo, desmantelamiento del estado de bienestar…mi entrada de 2014 no puede ser mas que un lamento. Y hablo solo por mí. Nada más.
No reprocho nada a nadie, y menos a tí, Megatron. Yo tengo en cuenta siempre la pobreza que nos rodea. Por esta entrada del mes de junio del año pasado, algún comentarista no amistoso, me llamó demagogo: https://elalminardemelilla.com/2013/06/18/sobre-la-extension-de-la-pobreza/
Me gustan las uvas dulces y y mucho más todavía el cava. Y por supuesto, el vino. Yo me lo he bebido todo sin remordimientos, más bien como un consuelo, ayuda a llevarlo mejor. (Lo del año «nuevo»)
Quizá no sea mala idea un consuelo de estos de vez en cuando algunos otros días del año.
¡Feliz 2014 a todos/as¡
¡Que el Señor nos pille confesados/as¡
No te preocupes Isa, confesados nos pillará, a otros no, pero esos no nos importan.