El mar blanco


 Las salinas del Cabo de Gata

                     Es el gran producto para la conservación de los alimentos. La sal generó una industria, las salinas, y un comercio muy próspero por todo el Mediterráneo. La sal puede encontrarse en estado sólido, y  en manantiales y en pequeñas lagunas de escasa profundidad. Es de suponer que el encuentro con este mineral soluble con el agua, se produjo de modo casual. Luego el ser humano, sobre todos los romanos, con la experimentación y la observación sacaron de ella todo su potencial. Las salinas del Cabo de Gata están llenas de agua todo el año. Solo al finalizar el mes de julio se ha evaporado casi todo el agua y ofrecen esta impactante imagen. Es un mar blanco, que luego se transformará en pequeñas colinas blancas. La extracción de la sal no es un asunto fácil. Las lagunas tienen que tener una determinada profundidad, pues de ella depende la calidad y cantidad de la sal. Se necesita también un Sol implacable, como el del Almeria, que provoque la constante evaporación del agua hasta convertirlo todo en este campo de sal de intenso color blanco. Por mucho que se vaya al mítico y afamado Cabo de Gata, siempre podrá encontrarse una imagen diferente.