En mayo de 2011, junto con la campaña electoral autonómica, surgió este blog, El Alminar. Ya entonces vaticinamos que el PP de Imbroda iniciaba su lento, pero inexorable descenso. El 2015 no alcanzó la mayoría absoluta, y solo el pacto con el exiguo Populares en Libertad, propiciaron una prórroga no deseada por el electorado melillense, de un modelo de gestión que ya estaba agotado en aquel momento. Estos últimos 4 años han supuesto la prolongación de un régimen agónico, gracias entre otras cosas, a los caprichos y engaños del sistema electoral D´Hont, que otorga una representación proporcionalmente mayor a los partidos más votados, que el porcentaje de votos recibidos. Escribíamos entonces, y lo repetimos ahora, que con un sistema proporcional de asignación de escaños, el Partido Popular estaría sin mayoría absoluta desde el año 2011.
Estas primeras elecciones de abril de 2019 serán distintas, porque convertirán en inútiles todos los sondeos para las siguientes, los de las elecciones Locales y Autonómicas del mes de mayo, en el 8º año del Alminar. Los políticos suelen decir que el único sondeo válido es el del día de las elecciones. En esa ocasión, casi por única vez, al adelantarse por solo un mes las elecciones Generales a las Locales, van a saber cuál será su suerte electoral con un mes de anticipación. En abril se sabrá quién va a perder en mayo, y también quién alcanzará la victoria en las urnas.
Concurrir a esas segundas elecciones sabiendo casi con una aproximación del 95%, cuál será el propio destino, se va a tornar o como un calvario, o como un camino de rosas.
Instantáneas de una noche de abril
La noche del 12 de abril anticipaba varias cosas, la primera era la de un final de ciclo. La presencia de Coalición por Melilla en unas elecciones Generales por primera vez, significa un cambio de rumbo muy importante. La llegada al Congreso de un diputado melillense rifeño no solo es posible, sino probable. Mustafa Aberchán ya fue el primer rifeño en acceder a la Alcaldía de Melilla en 1999, y ahora puede convertirse en el primer diputado. Lo tiene al alcance de la mano, en unas elecciones en las que parten desde la posición ganadora en nuestra ciudad. La división en la derecha y la desaparición del bipartidismo imperfecto, propicia que la ciudadanía tenga más posibilidades de propiciar cambios.
La obtención del diputado va a ser muy disputada, pero es casi seguro que al menos un senador sí caiga del lado de la coalición Cepemista. A priori la mejor situada es Dunia Almanosuri, Vicepresidenta 2ª de la Asamblea de Melilla y uno de los grandes valores políticos de CpM.
La victoria en las elecciones Generales va a caer del lado del Partido Socialista, en eso no existe discrepancia alguna. La única duda será el margen de ese triunfo y los posibles pactos para formar gobierno. Pedro Sánchez seguirá como presidente en funciones casi hasta las puertas del verano. Lo que acechará al futuro político del Estado será, a partes iguales, la presencia y expansión de Vox y el más que probable auge de Esquerra Republicana de Catalunya, que concentrará casi todo el independentista. Son dos sombras, tirando en sentidos opuestos y que pueden producir grandes fracturas en el consenso de la sociedad española.
En esta lucha de dos, en lo que se refiere a Melilla, sigue en la senda de la esperanza, la candidatura de Podemos, ya como única alternativa a la izquierda del PSOE en Melilla. Gema Carolina Aguilar se ha consolidado como líder de la formación podemita, y tiene ya una personalidad política definida, en el difícil y abrupto mundo de la política melillense. Su objetivo es estar lo más cerca posible del 5% de los votos, que le permitan alcanzar la representación política en la Asamblea, en el siguiente mes, el de mayo.
Nota:https://elalminardemelilla.com/2011/05/28/aberchan-versus-imbroda/
Pues sí, está en nuestras manos. Espero que no hagan que españa sea otra turquía, otra hungría, y un largo otra ….porque lo lamentaremos. Todos nos jugamos mucho. Hay partidos que venden odio y crispación, y hay quién se lo compra (algunos muy católicos) ¡tremenda hipocresía! Y el que vota odio muy poco va conseguir.
Muy acertada tu opinión y regreso, Miguel.
el voto por correo está echando humo y lo hará igual en las locales.
En éstas, ganará el PP y lo que le falte se lo sumarán Cs y VOX entregando la cuchara, como hizo el fake PPL en su momento. Si no de facto, bajo la mesa.
En las actuales, ganará el PP.
No me parece que unas elecciones vayan a tener un efecto definido sobre las siguientes de manera directa. Igual ante una victoria del PSOE puede haber gente que se arrime al sol que más calienta en la siguiente. O puede que la derecha reaccione y se pongan tras la nuca del (nefasto) alcalde. Tampoco se sabe qué pasa si Aberchán saliera, que no creo, y entonces no fuera cabeza de lista a las locales.
Todo abierto y solo un pensamiento…la derecha vota siempre. Ufana. La izquierda suele «pasar», distraída con sus discrepancias. Y luego está el peligrosísimo lastre de «son todos iguales», 20 años de imbrodismo más tarde, que no vota y nos condenan pero de verdad.
«Les alcanzará lo que temen, y les cogerá lo que les atemoriza».
«Los que aran la iniquidad y siembran la desventura, la cosechan»; si la piedad ya no es tu confianza, ni la rectitud de los caminos tu esperanza».
Para los lectores, comentaristas y chatines del Alminar de melilla: mañana hay que votar. Lo que sea, pero votemos, y hagámoslo por mejorar la democracia y por un mundo mejor. Y por supuesto, contra aquellos que prefieren un sistema autoritario. Saludos.
«Mucha gente pequeña, en lugares pequeños, haciendo cosas pequeñas, puede cambiar el mundo». EDUARDO GALEANO.
Hombre, Miguel, lo que sea… Y un sistema “autoritario” como que queda algo abstracto donde cualquiera puede meter lo que le parezca. Autoritario puede ser tener que pagar impuesto de sucesiones para demagogos como Rivera.
Y no creo que Galeano con eso que traes se estuviese refiriendo al hecho de votar. Pero bueno, puestos a hacerlo, ¿qué tal votar a los más justos dentro de lo que cabe? Dentro de lo injusto que es el sistema que obliga a los políticos a que nos expriman.
Con la frase de Galeano creo que se entiende perfectamente a qué me refiero. Hay que votar y hay que hacerlo con la cabeza. Votar es algo muy serio porque con el voto han alcanzado el poder a lo largo de la historia auténticos canallas. Los ciudadanos merecerán lo que la mayoría vote, y lo mínimo que debería hacer con mi voto, es asegurarme de que con mi voto no esté entregando un cheque en blanco a un partido que dice peste o que tiene antecedentes detestables. Yo espero que la gente no se deje envenenar por los charlatanes del odio y del miedo, de aquellos que manipulan nuestros sentimientos, porque no harán nada excepto proteger sus privilegios, su dinero y el de sus amiguetes.
Creo que estaba claro el sentido de lo que quieres decir, Miguel.
Muy claro en clave local.
Lo que yo digo también está claro. Cualquier voto no sirve, te podrás librar de algún indeseable pero si no se moviliza la izquierda no habrá manera de parar la ola reaccionaria que nos amenaza a todos.
Es obvio que tiene que conseguir el apoyo necesario. Y esa amenaza se combate con nuestro voto y con la ley. No queda otra.
Pues como diría Julio César: «Iacta alea est».