Esperando a un buen amigo
José Luis Blasco es el mayor historiador religioso de la historia contemporánea de Melilla y yo me atrevería a decir que de toda la historia. Ha sido y es uno de los mayores colaboradores del Alminar, en donde todos le conocemos como Imparcial. Sus aportaciones en el campo religioso son inigualables. A su lado, todo conocimiento sobre el mundo religioso apenas le hace sombra.
Melilla es una ciudad que rara vez reconoce nada a los que más hacen por ella. José Luis Blasco fue durante más de 10 años, y en dos etapas distintas, presidente de la Asociación de Estudios Melillenses y ha sido distinguido con el nombramiento honorífico de «protector del Patrimonio». Rencillas personales impidieron que fuese reconocida su labor en la AEM y se retiró de la asociación sin que le diesen la «medalla de oro», que sin embargo otorgaron a otras personas. En ciudades como Málaga o Almería, existe el cargo de «Cronista de la Agrupación de Cofradías», algo que en Melilla debería crearse y recaer el nombramiento sobre su persona. Ocurre que las rencillas en el mundo de la Iglesia, entre los llamados «capillitas», son tan grandes, que rara vez se ponen de acuerdo para cualquier nombramiento.
Compartí con él, en la AEM, entre los años 1990 y 1998, momentos muy entrañables y únicos, que guardo con mucho afecto. Todo lo que después nos separó, para mí esta olvidado y perdonado. No publica ningún comentario desde el día 20 de mayo y son muchas las personas que me escriben preguntando qué pasa. Solo sé que vive una de esas noches oscuras que en ocasiones nos alcanzan a todos y de la que espero que salga. El Alminar le necesita.
Los instantes más entrañables fueron cuando restauraron el templo Patronal de Melilla y la AEM se convirtió en improvisada capilla y todas las imágenes, incluida La Patrona, encontraron cobijo entre sus muros. Son muchas conversaciones, y alguna misa, las que compartimos junto a Fray Jesús Cortijosa. Esta imagen me gusta, porque está en su mesa de trabajo de la asociación, con el Santo Entierro detrás. Esta entrada, la número 600, está destinada a hacerle volver.
Nota: Todos sus artículos deberían ser recopilados y publicados. Son un monumento a la precisión histórica y al rigor en los datos. Un libro que le tenga a él como único autor y protagonista de su trabajo.
El Alminar de Melilla 
«Libre» después de una semana de trabajo intenso, vuelvo a leer este interesante Blog. Y lo hago para manifestar mi respeto y admiración hacia D. José Luis Blasco. Suscribo totalmente lo dicho por el propietario del Blog, y animo a D. José Luis a que salga más a la palestra para ilustrarnos con su sana sabiduría, alejada de los «relumbrones» a que nos tienen habituados que son pura fachada y que se suelen aprovechar del trabajo y desinteres de otro. Con el Sr. Blasco pinchan en hueso porque él no se casa con nadie.
Siempre es agradable el regreso de todos los que forman parte del blog, a la vez que se deshace «el bulo» sobre la «supuesta» soledad del Alminar. La realidad es que esta semana la media de visitas es de 900 diarias.
La primera vez que supe de la existencia de Imparcial, le llamo así, porque a jose Luís Blasco, a la persona, no la conozco, fue a raíz de una entrada en el blog con fecha 4 de Enero de 2012, en relación a la desaparición del Cristo de Limpias. Me sorprendió su conocimiento sobre la imagen, los detalles que relataba en relación al Cristo, su historia, y me fijé en un dato, cuando ofreció de forma desinteresada una foto del Cristo al administrador del blog. Una foto, parece ser valiosa, de gran ínterés y que él atesoraba con especial cariño. Cuando Hospitalario la recibió preguntó si podía publicarla, comentarla, qué hacer con ella. Imparcial contestó «es para tí, me consta que la querias».
En aquel gesto, de hace meses, pude imaginar que detrás del pseudónimo había una persona generosa, alguién dispuesto a ompartir su legado, sus conocimientos, su cultura sobre la historia religiosa de Melilla de forma desinteresada, y así lo ha hecho en el blog. En definitiva un buen hombre, no me cabe duda.
Posteriormente durante la Semana Santa de este año, comenté en el blog con Hospitalario acerca del Cristo de Mena que tuve la oportunidad de ver en procesión en Málaga, detalles del trono, de la imaginería y del gran escultor malagueño Palma Burgos. De pronto apareció Imparcial, manifestando «cuanto me impresiona leeros esas lineas, con esas bonitas palabras hacia las imagenes..»etc…. Solo alguién sensible al arte, a la cultura popular, y a la historia, y a la vida en general puede emocionarse como él lo hizo, fuistes sincero y yo te lo agradecí.
Desde estas letras te animo a continuar en esta blog, en el que tantas cosas me has aportado y has contribuido a enriquecerme en temas que yo desconocía, me has ayudado a querer más a esta bonita ciudad.. Así que recuperate y continuaremos juntos en este camino y como decía nuestro amigo….que tenemos que hablar de muchas cosas, compañero del alma….»
Hasta pronto.
¡ Paz entre los príncipes cristianos ! Aquí estoy abrumado por las numerosas llamadas de teléfono, algunas desde la península, interesándose por mí. Muchas gracias a todos. El próximo lunes volveré a la actividad normal, despues de un breve descanso, para reponer fuerzas. Gracias a Corona 71, Hospitalario, Cruz de Malta y a todos los que me habéis llamado. Sigo en la lucha.
En cuanto a los comentarios que se hacen en esta entrada, la número 600, nada me quita el sueño. A nada aspiro, ni nada quiero. Soy muy feliz, tengo grandes amigos dentro y fuera de la AEM, en el mundo de las cofradías, y en la ciudad en general. Retirado de todo, gasto todo mi tiempo en recordar a los mios.
Creo que no merezco estar aquí. De todas formas, gracias por vuestro afecto.
De verdad que me he emocionado. Debéis saber que Imparcial es el hombre más íntegro y sincero que he conocido. Muchas de nuestras conversaciones tratan de lo divino y de lo humano que ocurre en el mundo, pero jamás le he escuchado una palabra deshonesta, ni reproche hacia los que les hicieron el «hueco» una vez que, debido a asuntos privados, se marchó de la AEM. Él como hombre bueno, y buen cristiano, ha perdonado todo el calvario que le hicieron padecer esos «capillitas», que ahora le dan palmaditas en la espalda solicitándole información. Desde estas líneas, y dentro de un rato; quizás mañana, le daré un fuerte abrazo.
Gracias Igueriben. De verdad que me habeis abrumado. Me gustaría que cesara esta seríe de elogios que no merezco. Os pido lo dejeis, hay muchas cosas importantes de las que hablar y escribir. No abrumarme. Prometo seguir colaborando.
Por supuesto, Jose luis, que hay muchas cosas más importantes de las que hablar, escribir, comentar pero para los melillenses que tenemos fe, ilusión , inquietudes etc… TU eres una de esas cosas..MELILLA y este blog no puede permanecer ajeno a tu sabiduría, tú generosidad, tú apoyo etc.. Animo y te esperamos.
Imparcial me sorprende tu ausencia estos días en el blog, teniendo en cuenta tus conocimientos sobre el mundo religioso, y tu acercamiento a la fe, después de las entradas que Hospitalario nos ha regalado en los últimos post sobre la figura de El Bautista y el espiritu.
Me gusta leer tus comentarios y opiniones.
Hospitalario sabe que Imparcial le sigue día a día. Lo leo todo.Sus entradas sobre El Bautista y sobre el espíritu. Las comparto.
Me alegra saber de tu presencia aunque en la sombra. Siempre es agradable compartir testimonios de fe, el mundo actual está tan falto de la luz , solo estamos atentos a lo material, a la política, y a todo lo mundano. Pero… tan alejados de lo otro. Afortunado cualquiera de nosotros que sea capaz de discernir ambas cosas y vivir feliz.
Pues sí, amiga Cruz de Malta. Imparcial es el Simón Cirineo de este blog. Saludos a todos y gracias por vuestra constancia.
Buenos días.
Han pasado muchos años. Hoy, al leer este post he sentido nostalgia. Mucha nostalgia.
Estamos en 2021. Fecha de las grandes efemérides bélicas que llenaron de luto a muchas familias españolas.
La campaña de 1921, la gesta de Alcántara 14, la llegada de diferentes regimientos y tropa, etc.
Y el Centenario de la muerte de la melillense Madre María Dolores Segarra, fallecida en Olor de Santidad y en Proceso de Beatificación. Libertad Digital se ha hecho eco. En Melilla nada.
Hospitalario, tuya es la palabra. En todo caso el teclado de tu ordenador.