» A vosotros os ha sido dado a conocer los misterios del Reino de Dios, pero a los otros de fuera todo se les presenta en parábolas, para que: Mirando, miren y no vean; oyendo, oigan y no entiendan, son sea que se conviertan y sean perdonados». Marcos 4, 11-13
Cada viaje estacional a Almería, queda marcado en mi vida por una nueva búsqueda, o por una circustancia distinta. Llevo apenas un año escribiendo en el blog de El Alminar, sin embargo, llevo 6 años escribiendo de un modo regular y constante, los cinco anteriores en los periódicos de Melilla, en donde he dejado escritos varios cientos de artículos. He conocido cosas nuevas y también he profundizado en otras que ya sabía. A lo largo de la vida de cualquiera siempre se distinguen varias líneas que la recorren. En una época tendrán más intensidad unas que otras, pero a la larga, el tapiz que componen siempre cobra un sentido.
La semana del manto de La Virgen de San Pedro
Esta Semana Santa del año 2012 quedará por el encuentro con el maravilloso manto de la Virgen de Los Dolores de la parroquia almeriense de San Pedro, que a su vez había pertenecido a la Virgen de Los Dolores de San Agustín de Melilla. Era algo buscado y se ha podido culminar. Las imágenes ya están ahí para siempre, para la memoria de la Melilla actual y la pasada, que tan ingrata fue para con las cosas que componían su entramado religioso. Sé que muchos silenciaron lo ocurrido durante 30 años, que incluso hubieran preferido que jamás se hubiese vuelto a hablar de ello, pero eso es una de las cosas que no pueden impedir. El derecho a la memoria y al recuerdo. Quería hacer unas fotos de la Virgen y de su manto en plena procesión, tal y como la vieron los melillenses durante décadas. La localicé regresando a su templo, el de San Pedro, arropada por sus fieles, envuelta en incienso y música.
Retirando el manto de protección social
Sin embargo la paradoja del manto de protección empieza ahora. Ayer, un nuevo e impetuoso colaborador, Alminarense, que ya ha dado nombre a todos los seguidores de la Comunidad de El Alminar, nos sumergía de lleno en lo que nos espera tras el letargo litúrgico semanosantero. Nos espera la crisis, que no es global sino Europea, que en España tiene el añadido del estallido de «la burbuja inmobiliaria». Nos espera un millón de parados más a final de año y el sentimiento de inseguridad para todos los trabajadores que hasta le fecha podían considerarse inamovibles, los de La Administración del Estado. Ese tipo de trabajo que casi nadie quería en los tiempos de bonanza, y a los que ahora casi todos desean ver caer, o al menos recortados en sus derechos y salarios.
El nuevo gobierno ha decidido retirar el manto de protección que amparaba al último sector de trabajadores, el de los asalariados estatales. Ha empezado a retirar también el manto de protección, casi sin que se note, al resto del paraguas social, el de la Sanidad, el de la Educación, el de los Servicios Sociales. La calidad de los servicios que proporcionaba el Estado, va a empeorar de modo irreversible en los próximos años. Sin embargo, los que están tomando esas medidas, no van a notar ninguna de las consecuencias de esas medidas. Están protegidos por la nomenclatura que constituyen, y por los privilegios que se han ido concediendo a lo largo de décadas, y a los que no están dispuestos a renunciar.
Todavía no he oído que vayan a reducirse a la mitad los sueldos de los políticos, y de su pléyade de cargos de libre designación, en Ayuntamientos y diputaciones. El salario medio de un político es entre tres y cuatro veces más alto que el sueldo medio de cualquier trabajador español, por lo que reduciéndose a la mitad, seguiría siendo 1½ superior, o incluso el doble, que el asalariado medio de su ciudad. Esta sería medida de obligatoria e inmediata adopción. Estas cosas deben empezar a ser exigidas por los ciudadanos. Debemos empezar a exigiarlas. No pueden obligar a hacer sacrificios a los ciudadanos, ya bastante y siempre sacrificados, y no hacer «ellos» y sus nomenclaturas ninguno.
¿Por qué mezclo lo sagrado con lo profano?. Por que está absolutamnete mezclado y relacionado. Ayer, Alminariense me sacó del letargo y ya le he dado una primera medida contra la crisis, como me pidiera Empirismo.
Te felicito por haber culminado tu búsqueda con éxito, con unas fotos muy conseguidas, que encierran detrás toda una historia.
La reflexión es muy buena, echaba de menos tu aguijón y tu pluma fina.
Ya no hay más dilaciones ni demoras. Ahora ya debemos enfrentarnos a nuestro futuro. Gracias Cruz de Malta por estar siempre cerca. Mañana ya estaremos en Melilla.
Mientras y gracias a tu empeño,mis ojos lo han vuelto a ver un montón de años despues.Podría decirte que los borbados del manto de Almería son mucho más ricos que los del manto de Melilla.Una observación.El manto de Melilla,lleva el escudo de la ciudad.El manto que perteneció a La Paloma,lleva el Escudo de España.y una única singularidad.El Escudo Oficial de España durante el reinado de Alfonso XIII,-¡ESCAPÓ DE LA DESTRUCCIÓN DE LOS SIMBOLOS MONÁRQUICOS EN UNA CIUDAD COMO MELILLA ! Se te ha pasado,Hospitalario.
Hombre yo creo que ser funcionario ha sido siempre apetecible, ya sea tiempo debonanza o no. Lo unico que se pide es que todos los trabajadores tengamos las mismas prestaciones y que no haya privilegios solo para unos pocos. Los complementos economicos que tienen los funcionarios de fuera de la peninsula simplemente son especialmente denigrantes; y si un funcionario debe cogerse un dia para arreglar algo, que lo coja de sus vacaciones, como hace el resto del mundo. Por ejemplo
Y si los funcionarios tienen tan mala prensa (aparte de los ataques del Pp) sera por algo. Y es que yo creo que el resto de los mortales ya estamos hartos de tanto privilegio laboral.
Unos ejemplos reales y recientes:
http://soycalamardo.blogspot.com.es/2012/02/intermedio-hablale-de-productividad-un.html
Hospit, a veces, sus comentarios resultan un tanto crípticos. Me calificas de partidario del empirismo, según la R.A.E.: 1. m. Sistema filosófico que toma la experiencia como única base de los conocimientos humanos.
2. Procedimiento fundado en la práctica y la experiencia.
La política es mundana, la religión es sagrada. No está mezclado. De hecho, la política es la responsable de todo lo que hay de malo en la humanidad. Los politicos ansían el poder, en cambio, la religión es una búsqueda de Dios, de la verdad.
No es que sea justo o no lo que cobran los políticos (senado, diputados, presidente del Congreso …), es que no lo merecen. ¿Y qué decir de los beneficios que reciben, pensiones aseguradas ect, etc? Es inmoral con la crisis que hay mirando hacia otro lado, esto es difícil de arreglar. Hay democracia, por supuesto, pero no hay dignidad.
Un saludo.
Alminariense, parte de la respuesta, casi un 80% iba dirigida a tí. El resto era para Empirismo, un colaborador reciente que me pidió posibles ideas ante la crisis que nos devora.