En el nuevo espacio recuperado del Baluarte de San Fernando, que no hubiese habido que recuperar si hubiesen sido capaces de mantenerlo, existía un monolito dedicado a los Ángeles Custodios, Rafael, Miguel, Gabriel o cualquiera de ellos. Allí estuvo hasta la década de 1990 el cuartel de La Policía Nacional de Melilla. No recuerdo si ese monolito de mármol blanco se instaló en época de los alcaldes de La Democracia, o si fue instalado en épocas anteriores, cuando se reinterpretó todo el pasado de Melilla en claves místico imperiales. Es lo mismo. El caso es que el monolito estaba allí en la navidad del año pasado, en 2010, cuando realicé todos las fotografías con las que demostrar la falsificación de la zona. Estaba allí cuando se iniciaron la sobras de reconstrucción del Baluarte.
Podría haber permanecido en ese lugar simplemente como elemento decorativo, pero estamos en la ciudad en donde se roban estatuas de la calle o en donde desaparecen cañones de Melilla La Vieja, sin que nadie llegue a enterarse del asunto. Aquí se prefiere un ladrillo con tal de que sea nuevo, antes que conservar cualquier elemento ornamental del pasado. A quien correspondiese, está claro que le sobraban todos los ángeles custodios. Realmente no necesitan ninguno.


Allí,lo que había en la década de los 70-80 era un CRUCEIRO de piedra caliza blanca y un hermoso jardín.Al parecer,había un capitán de la Policía Armada,amante de la belleza,de la naturaleza y del arte.
Tus aportaciones siempre son bienvenidas. Donde antes había un «hermoso» jardín y un Cruceiro, que no monolito, ahora no hay nada. Una lisa, nueva y anodina explanada.
Un Gobierno Autonómico que lleva once años ejerciendo esa función, casi con las mismas personas, no puede decir: «hemos recuperado el Baluarte de San Fernando». Si lo han recuperado, es porque antes lo habián perdido y si no hubiese hecho yo las fotos, no quedaría ni el testimonio.