El llamado Patio del Cura, amplísimo solar en la parte trasera de la iglesia de Sta. Mª Micaela, finca registral 12252, fue cedida por el Estado a la Ciudad Autónoma en 1996, según RD 339/96 de 26 de febrero.
Ese inmenso solar consta de un edificio, zona arbolada, patio y campo de deportes. El edificio ha tenido varios usos a lo largo de las décadas. Allí se hacían la fiestas del Barrio de La Victoria, los bailes, competiciones deportivas
El Estado se lo dio a la Ciudad, a Ignacio Velázquez en 1996.
En 1999, Juan José Imbroda (Consejero de Economía del Gobierno cuatripartito), presidido por Enrique Palacios) cede gratuitamente todo el solar, inmueble y zona forestal al Obispado de Málaga.
Es usual que las Administraciones no suelan saber qué hacer con solares transferidos y menos la de Ignacio Velázquez en 1996, en plena descomposición y muy acosada por entonces la Unión del Pueblo Melillense, que le acusaba de corrupción, de despilfarro, de prepotencia, de excesivos sueldos, de exceso de altos cargos. El solar queda abandonado durante 1996 y 1997. En 1998 Velázquez convoca el “abortado Pleno de la censura”, y cae como presidente de la Ciudad Autónoma.
Enrique Palacios se hace cargo del Gobierno más funesto de la historia de Melilla, el llamado “cuatripartito” y las Consejerías se convierten en Taifas, en las que nadie sabía lo que hacía el otro, pero tampoco se preguntaba. En 1999 el Consejero de Economía Imbroda. sorprendió a propios y extraños, presentando un expediente de cesión al Obispado. Tres años después de la cesión del Estado a la Ciudad de Melilla, el terreno es regalado al Obispado de Málaga sin obtener una sólo peseta (era la moneda de la época) de beneficio y los melillenses y el Barrio de La Victoria perdimos una zona de esparcimiento, en la que incluso se podría haber construido un nuevo colegio, una guardería amplia o cualquier otra cosa que sirviese a todos.
Las fotos son de 2009. Hoy el patio solo se usa para entrar a las zonas en donde se imparte la catequesis. El deterioro, dos años después, debe ser mucho mayor. ¿Todo es extraño y sin explicación lógica en Melilla?. Tras muchos años de seguimiento, de investigación, de colaboración y de aportaciones a la realidad política, cultural y social de nuestra ciudad, empiezo a pensar que sí, que lo inexplicable es intrínseco a las acciones de nuestros gobiernos. Que nada es lo que parece y que siempre hay una razón oculta detrás de decisiones aparentemente transparentes. Esta no tiene explicación alguna once años después.
Tiene otro uso curioso. En los meses anteriores a la Semana santa, allí ensaya una de las bandas que acompañan a una de las Cofradias, sin tener en cuenta que estan al lado de un Hospital. Desgraciadamente he tenido a familiares ingresados, bien en urgencias, bien en planta y es intolerable que cuando una persona necesita reposo y tranquilidad empiezen con los ensayos a las 4 de la tarde y no acaben hasta las tantas. Me consta que alguien llamó a la Policía local para denunciar el hecho y la respuesta fue más o menos, que no podían hacer nada ya que cumplian la ordenanza municipal….
¿ Hay algo que se respete en Melilla ?. En las inmediaciones de un Hospital no se puede hacer ningún tipo de ruido. Desconocía este hecho. Lo vigilaremos, D.M. (Dios mediante).
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Entre cesiones, regalos, donaciones e inmatriculaciones…. han conseguido un extenso patrimonio.
Lo que fastidia que la gente de melilla se queja de la banda de las horas. Ala que empieza a tocar pero no sé quejan de los 365 días al año las 5 veces al día de lunes a lunes de los cánticos que hay desde antes de las 6 de la mañana
La gente se queja, pero lo que hay que buscar es el equilibrio. Ahora suenan las campanas de las iglesias y está muy bien. Todo tiene que tener volumen y horario.