Colapso en la cola de Raphael


         Este post va unido al anterior y si en algo ha sido bueno que el Presidente de Melilla haya hecho la cola, es porque él mismo ha comprobado la escasa agilidad de un sistema «duplicado» de venta. Si se fijan en la posición del Presidente, se puede comprobar que apenas tiene 30 personas delante suya. No es normal que haya tardado casi dos horas en conseguir «sus entradas». El fracaso principal ha sido el del sistema informático, que ha ido muy lento y en el caso de los que hacíamos la cola desde la calle Ejército Español, el desastre ha sido completo, pues ha estado casi una hora sin funcionar. Esto último ha sido otra de las causas de la interminable espera a las que no hemos visto sometidos los ciudadanos.

      No se pueden duplicar la colas. Esto es una norma europea en bancos, espectáculos, aeropuertos, estaciones marítimas. Al público se le debe recibir en cuantos ordenadores o taquillas se quiera, pero formando una sola cola, porque así, si hay un problema en alguno de los puntos de venta, no se lo tragan los que están colocados en una determinada posición. Ha ocurrido que los que formaban la cola de Pablo Vallescá, han tardado dos horas menos en conseguir sus entradas y sobre todo, han acaparado casi todo el patio de butacas y casi todas las plateas, mientras que los que estábamos en el otro lado, hemos perdido toda la mañana y además hemos copado las entradas de «gallinero» o anfiteatro.

            Otra cosa que no se ha entendido es porqué las mesas con los ordenadores (dos mesas, cuatro ordenadores), estaban separadas de la zona en donde estaban las entradas, en la zona central de recepción. Esto obligaba a seleccionar las entradas en las mesas, esperar a que la azafata encontrase las entradas, volviese con ellas y tuviese que realizar otro viaje para llevarse el dinero. Es el sistema más complicado y lento posible. Los visualizadores de ocupación del aforo, han funcionado a ratos y no siempre con toda la información actualizada.

          Cuando uno llegaba con la información visual de los paneles, debía arrodillarse (no para suplicar las entradas o confesar), sino para comprobar si lo visto en pantalla, se correspondía con la información más actualizada del ordenador. Algunas azafatas se han visto obligadas a realizar hasta cuatro viajes para informar al cliente.

   PD: Por lo demás, se trata de un éxito indudable el que se hayan vendido casi 2000 entradas (todo el aforo) en el espacio de cuatro horas. Los empleados han trabajado sin descanso y el ViceConsejero de Festejos no se ha apartado ni un momento de la zona de ventas.

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Imbroda hace cola para ver a Raphael


       Es la imagen del día, la del año, la de la década. Juan José Imbroda, el todopoderoso Presidente de La Autonomía de Melilla, ha hecho cola desde primeras horas de la mañana, para sacar sus entradas (tenía derecho a 6), como cualquier otro ciudadano. Nuca se había visto nada igual en Melilla, nunca nadie lo había hecho antes, pero si Juan José Imbroda lleva 11 años como Presidente de Melilla y más de 30 años en la política activa, es porque sabe anticiparse como nadie a cualquier hecho políticamente peligroso. En los últimos acontecimientos representados en el Kursaal, ha habido todo tipo de comentarios, rumores y hasta evidencias, acerca de la «reserva de  entradas» para los VIP (very important person), Sin embargo, hoy, el presidente Imbroda ha decidido acabar de un plumazo con cualquier especulación y ha ordenado poner todas las entradas a la venta y a la vista del público.

          Además ha tenido hasta suerte, porque había dos colas y la suya, la que se iniciaba en la calle Pablo Vallescá era la buena y en apenas dos horas ha salido del Kursaal con sus entradas en la mano. Los que estábamos en la cola lenta, hemos necesitado dos horas más, para conseguir la nuestra, eso sí, de «gallinero», osea, de anfiteatro. Pero esto ya ha sido únicamente cuestión de suerte.

      PD: Ha hecho cola sin trampa ni cartón. No tenía «un emboscado»  guardándole el puesto hasta que él llegara. Allí estaba, en persona,desde poco mas de las 09h am. Tampoco ha dejado que le cedieran el puesto, que lo hubiesen hecho gustosos todos los que estaban antess que él. Hoy en El Alminar había otras cosas previstas, pero la noticia del día es ésta. La siguiente versará sobre el caótico sistema de venta de entradas.

Puesta de Sol en la Granja Agrícola


          A veces la naturaleza, Melilla, nos recompensa con imágenes espectaculares, como esta puesta de Sol tras el palacete de «estilo nazarí», que corona la 1ª Fase del actual Parque Forestal, la antigua Granja Agrícola. Por muchos que sean los despropósitos y los errores de los humanos, es verdad que la naturaleza siempre se abre paso. De vez en cuando sucede un instante mágico, una imagen fugaz que nos reconcilia con nuestro entorno. Un contraluz potente, los últimos rayos solares del día que se despiden hasta el día siguiente. La vanidad humana consiste en creer que dentro de 100 años algo de esto permanecerá. Lo mismo pensaron quienes diseñaron e inauguraron La Granja Agrícola y hoy no queda el más mínimo recuerdo de ellos, ni de su obra. Lo mismo ocurrirá con este dentro de 100 años, pero el Sol seguirá ocultándose por el mismo lugar.

         «Los hombres viven obsesionados por la inmensidad de lo eterno, por eso nos preguntamos: ¿Tendrán nuestros actos eco con el devenir de los siglos, recordarán nuestro nombres los que no nos conocieron  cuando ya no estemos, se preguntarán quiénes éramos?».