Proliferación de obras y de accidentes


 

        La Consejería de Seguridad Ciudadana hace ya mucho tiempo que es solamente un nombre en Melilla. No critico a la Policía Local, que bastante hace con mantenerse en pie, teniendo tales responsables a su frente. Tampoco lo digo porque sean más eficaces que otros anteriores, sino porque las Consejerías se están otorgando como recompensa y no se está buscando la eficacia o personas que pertenezcan al mundo de la Seguridad Ciudadana. Se escoge simplemente al que ha servido bien al partido o al jerarca, sin importar lo más mínimo el perfil profesional.

      El masivo y descontrolado corte de calles. La realización de obras «a granel», sin prever las vías alternativas, sin información previa al ciudadano sobre qué calles están cortadas o cuales abiertas, están convirtiendo a Melilla en un permanente caos de tráfico. Se circula en tensión, en atascos interminables, con desregulación absoluta de semáforos, en permanente estado de estrés y sobre todo, se circula con los coches por bancales y caminos de carros. No existen en Melilla cien metros continuos  de asfalto liso, sin triturar. Todo son zanjas mal cubiertas, con firmes de diferentes tipos, con zonas hundidas del pavimento. Se circula en permanente peligro y todos los días ocurren accidentes graves. Parece que ya no existen, porque ya no se reparte ni publica el parte semanal de accidentes.

        Cuando algo no interesa, simplemente se toma la medida de hacer desaparecer la información relativa a determinado aspecto. Sin embargo, lo que uno ve en la calle  es algo distinto. Y si no me creen, pregunten en las compañías de seguros. Este accidente aparatoso y grave, y  ha sucedido apenas unos minutos antes de que yo cruzase por la zona, calle Luis de Ostáriz en cruce con calle del Hospital Militar. El descenso de Ostáriz hacia Altos de la Vía ha sido cortado para realizar una nueva obra, la de los miles de kilómetros de nuevas tuberías. Todo es una lotería, un puro juego de ruleta, que le puede tocar a cualquiera.

      La iluminación en la zona es pésima. La información nula. No están los tiempos para dejarse los coches o la integridad física, gracias a una deficiente gestión de la Seguridad Ciudadana.

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El pasado de la Granja Agrícola


          El sendero de los algarrobos

    La granja Agrícola no solo era un edificio. Eran cultivos, plantaciones y estudios científicos del terreno. el conjunto era una obra del Protectorado español en Marruecos. El terreno era de verdad, el propio y no un decorado artificial como ahora. Estaba dispuesto en terrazas, lo que facilitaba la separación de cultivos y además protegía la tierra en caso de lluvias torrenciales. Ahora es un calvero, lleno de grava y de tierra artificial. No conservaron ni uno sólo de los edificios que existían. Lo allanaron todo y aparte llevan la gastados los 5,5 millones de euros de la 1ª Fase, no se sabe cuantos de la 2ª y una cantidad desorbitada  en mantenimiento. 

     Lo curioso, es que cuando Guelaya inició la campaña para proteger el suelo original y las dependencias de la Granja Agrícola, el hoy presidente de Melilla Juan José Imbroda  estampó su firma en las hojas de peticiones, claro que entonces el presidente era Ignacio Velázquez. Años de derroche en Ayuntamientos, Comunidades Autónomas, en Diputaciones, en El Estado en su conjunto nos han llevado a la situación actual y lejos de poner coto y freno, legal si hace falta, a todo ese disparate, solo se piensa en seguir realizando una obra tras de otra y cuanto más onerosa mejor.

      Total, para que 7 u ocho millones de euros después, todavía no se haya igualado en belleza, al terreno original de La Granja Agrícola y a su maravilloso paseo de algarrobos, plantados de modo científico. Las praderas tampoco tienen nada que ver con las actuales, en donde predomina el marrón del falso terreno. Poco más hay que decir, tras colocar estas fotos propias, que El Alminar de Melilla tiene el placer de compartir con todos.

  PD: La plataforma Salvemos La Granja Agrícola se constituyó en 1997. Todos los partidos políticos y asociaciones de la época formaron parte de la misma, entre elllos la UPM. En el documento que adjunto, se puede leer el encabezado del texto reivindicativo y la firma del hoy Presidente Imbroda. Cuando constituímos aquella plataforma no nos referíamos a hacer de la Granja Agrícola el decorado tórrido en el que lo han convertido y mucho menos a gastarse entre 8 y 10 millones de euros.

       Nota: https://elalminardemelilla.com/2011/09/12/la-particion-dle-parque-forestal/