Endeudados en Melilla


     

 MELILLA es la 8ª ciudad de España con más deuda por habitante.

1ª- Ceuta 2.483,67 €
2ª- Madrid 2.081,39 €
3ª- Benalmádena 1.597,17 €
4ª- Calvià 1.361,69 €
5ª- Benidorm 1.310,64 €
6ª- Teruel 1.291,11 €
7ª- Málaga 1.266,57 €
8ª- Melilla 1.242,85 €
9ª- Gandía 1.197,20 €
10ª- Zaragoza 1.115,05 €
11ª- Reus 1.099,72 €
12ª- Puertollano 1.043,56 €
13ª- Valencia 1.024,68 €

                    La presentación en los primeros días de la semana de la «deuda viva» de Comunidades Autónomas, capitales de provincia y municipios, se hizo en Melilla de un modo algo engañoso. En aquella relación hecha pública por el Mº de Economía y Hacienda y comentada por el Gobierno Local, se decía que Melilla ocupaba el puesto nº 38 en esa relación y esto se presentaba casi como un triunfo. Fijándose bien en los datos, se aprecia que se habla de la suma total de la deuda, y está claro que en términos absolutos, la de Melilla es de las menos elevadas, porque nuestra ciudad es más pequeña con respecto a casi todas las capitales de provincia españolas.

                    Sin embargo, un dato aportado por Ignacio Velázquez en el Facebook del grupo Populares en Libertad, me hizo ver las cosas de otro modo. En la relación de «deuda por habitante»o per cápita, que es como se mide el impacto de esa cifra, resulta que Melilla es la octava capital de provincia o municipio más endeudado de toda España. En esa relación Ceuta ocupa el primer puesto en cuando a endeudamiento «per cápita», incluso por encima de la super endeuda ciudad de  Madrid.

                Luego sería el PSOE de Melilla el que arrojaría más luz y afirmaba que con respecto al presupuesto de Melilla, 280 millones de euros anuales, los 105 millones de deuda renococida por el Gobierno Local, superan el 33% del Presupuesto total de gasto de la CC.AA. de Melilla. Osea, que pese al maquillaje de cifras y al baile de presentaciones, Melilla está muy endeudada, algo que ya se sospechaba.

                 Como ejemplo baste decir que los 3 últimos camiones del Cuerpo Bomberos se han comprado por el sistema de «leasing» o crédito de alquiler, con lo que al final se acaba pagando el doble del precio bruto del camión y eso sucede cuando no hay liquidez para efectuar la compra.

Anuncio publicitario

Guia para repetir elecciones


 

            PP, octubre de 1989, el precedente.

              En octubre de 1989, Felipe González adelantó un año las elecciones generales (era un verdadero mago del adelanto electoral) y los escaños que el PP había obtenido «honestamente» en 1986, con algaradas callejeras durante toda la campaña electoral frente a La Delegación de Gobierno, volvieron a la filas socialistas. Julio Bassets Rutllant (único melillense que ha sido diputado y senador), volvió a derrotar al PP, la verdad es que Bassets derrotaba casi siempre al Partido Popular, liderado en aquella época por Jorge Hernández Mollar, que en ningun momento ni fotografía perdió la cara de noqueado.

            El Partido Popular había perdido las elecciones y eso no podía ser, así que en principio reclamaron a la Junta Electoral de Zona y no obtuvieron una respuesta satisfactoria, por lo que la 1ª recomendación sería no intentar anular unas elecciones mediante reclamaciones a la Junta Electoral, porque eso es como jugar al mus y pretender ganar solamente «envidando a chicas». Si se quiere ganar, hay que ir de órdago y siempre a » grandes o a juego».

            Así pues, el PP fue elevando el tiro de sus espectativas y de solicitar sólo la reeptición de las elecciones en el colegio Juan Caro, acabaron reflexionando sobre la posible presentación de «un contecioso electoral» y finalmente se decidieron por el órdago a la grande, esto es, el todo o nada electoral. Acabaron presentando un a denuncia ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía y al  final, en apenas 6 meses obtuvieron el premio buscado: » La repetición de elecciones» en Melilla y la vuelta del reves de un resultado electoral adverso.

                       ¿ Los motivos ?

          Los motivos son sospechosamente parecidos a los actuales, por no decir que son siempre los mismos motivos que se alegan en Melilla, elecciones  tras elecciones:    » No comprobación de un posible voto doble de  interventores de un partido político, falta de criterio único sobre los votos anulados, emisión de votos con identificaciones distintas al DNI, no verificación de los certificados de Correos al aceptar los votos por correo de emigrantes, actas con tachaduras, problemas en el escrutinio y recuento de los votos».

         Pero el motivo principal era: » La posible manipulación del voto musulmán». Esto era lo que denunciaba el PP en 1989. Toda una paradoja. Mi consejo pues sería, que se dejase constituir La Asamblea de Melilla, buscar el precedente de 1989, acudir a la Jurisdicción ordinaria y si los motivos son los mismos o casi miméticos, solicitar la anulaciñon y repetición de las elecciones, del modo en que ha recomendado la Junta Electoral Central. Retardar un mes la constitución de La Asamblea es jugárselo a  «chicas».

Una zona infantil en colapso absoluto


                 Peligroso estado del travesaño del columpio

                   Han pasado sólo dos días desde que un ciudadano, desde un blog personal (La otra Melilla), lanzara la alerta.  El lunes, el propio «cuidador» del Parque Infantil llamaba a la Policía Local alarmado por el estado de una de lsa áreas de juego, que procedió a clausurarla. Ayer mismo, desde este blog, poníamos nombre a la causa que está devorando «el parque infantil», la carcoma. Por la mañana, los Bomberos y los servicios de inspección de La Ciudad Autónoma, cerraban otra atracción, la tercera de las cinco existentes en el parque.

                      Sin embargo, se les pasaba por alto el gravísimo estado del travesaño del columpio, completamente carcomido y a un solo paso del resquebrajamiento, a un sólo paso de que cualquier niño o niña salga lanzado mientras se mece en los columpios.

                     Todo un ejemplo de un tipo de gestión, que los ciudadanos han decidido que continue cuatro años más. Una gestión virtual, basada solo en la propaganda, que no resiste ser sometida a la realidad de las cosas. Una Gestión, en la que son los propios ciudadanos los que tienen que alertar, del estado de las cosas, mientras un gobierno esclerotizado y sin capacidad de reacción, absolutamente desgastado, ni siquiera es capaz de tomar la única medida que debe, la única medida sensata: «Cerrar el área infantil del Parque Hernández».